Nos hacía gracia probar un Barolo que no fuera tan viejuno como todos los probados hasta la fecha, todos anteriores a 1980. Éste tiene ya 10 añitos, del 2012. La verdad es que es como si un italiano hubiese probado solamente riojitas viejunos, no tiene mucho sentido... Lo abrimos y dejamos que respirase por espacio de dos horas antes de proceder con su valoración a 16°C. Tapón corto, compacto y apenas tintado un mm desde su base.
VISUAL: Presenta una capa media, de color rojo cereza, brillante y cristalino, con un amplio ribete en tonalidades anaranjadas en su borde. De lágrima abundante, grosor medio y transparente (87).
OLFATIVA: Curiosamente se nos antoja floral de entrada, con notas de flor azul y rosas rojas. También se percibe algo de fruta roja fresca, fresas y frambuesas. Agitamos la copa y aparecen especiados de pimienta negra y clavo muy sutil. Al rato asoman herbáceos de montebajo mediterráneo y hoja de pino, notas balsámicas de resina y eucalipto mentolado, y en cuanto a la crianza, se aprecian aromas licorosos de duelas envinadas. Con un ligero toquecito fúngico de boletus y un sutil recuerdo terciario de cuero curtido. Sobresaliente en nariz, percibiéndose joven en general, pero mostrando ya algún matiz aviejunado. Relativamente fresco (91).
GUSTATIVA: Gran pegada!, de acidez brutal, con una importante frutosidad y con el tanino poderoso. Muy buena pinta en su ataque, con visos de perdurar muchos años. Paso por boca de tacto secante, con la fruta predominante y con la madera insinuante, percibiéndose recuerdos dulzones de mermelada de fresa y compota de ciruela negra. En retronasal nos vienen fragancias florales de violeta y especiadas de pimienta negra. Y el post-gusto... pues licoroso, de cuerpo medio, transmitiendo sensaciones de una fabulosa evolución futura en botella, no menos de 10 años para alcanzar su clímax. En estos momentos se percibe exuberante, poderoso, con mucho por decir en un futuro. La madera está presente, con el roble marcado y mostrando finos terciarios de cuero viejo y chocolate negro. Persiste dos minutos y 55 segundos en boca, y repito, Barolo en clara fase ascendente, rabioso en estos momentos, incluso tras dos horas oxigenándose muestra todo su ímpetu, aunque se bebe maravillosamente ya, sin ningún problema (92).
La RCP la dejaremos en buena. Nos costo un poco menos de 31 euros.
MARIDAJE: Lo abrimos con un pollo al horno en masala. En la segunda ocasión acompañó unos jugosos bistecs cuencanos a la pimienta con alcachofitas. Otro día fue con unas ricas lentejas con costilla, y nos terminamos un culito que quedaba con un poco de parmesano reggiano. Fabuloso con los bistecs, apuntes cárnicos y especiados en absoluta armonía con la intensidad y frutosidad de nuestro exquisito Barolo. Con el queso parmesano también fue una pasada... Gran disfrute amigos!.
VIDEOCATA: https://www.youtube.com/watch?v=4BNGmSMpijw&t=3s
Salud-os!!