DATOS

VOLADEROS representa la recuperación de un estilo de vino que desapareció a finales del s. XIX: un pedro ximenez seco tranquilo que no superaba de 14° Alc. conocido como Mountain Wine. El Pedro Ximénez o Pero Ximen era el vino que dio más fama a Málaga, “haciendo memoria de él cuantos escriben de esta Ciudad, llamándose por antonomasia, Vino Malagueño”. García de la Leña 1789.

Los pagos tardíos o de los Montes de Málaga eran los más acreditados por su calidad y abundancia “estos son de los que hablan los Historiadores, y los que han dado en todos tiempos fama a sus generosos vinos. El Pero Ximén hijo castizo de estos Montes, es de los más suaves, fragantes, fuertes, espiritosos y especiales de España y aún de la Europa” García de la Leña 1789.

Actualmente, las viñas que perviven en Los Montes de Málaga tienen valor museístico por su antigüedad e historia (según la terminología utilizada por la Junta de Andalucía). Bodegas Victoria Ordóñez e Hijos ha acometido la tarea de localizar dichas viñas, regularizarlas en la Denominación de Origen y rescatar la elaboración del afamado Mountain Wine con la uva Pedro Ximenez más apreciada en Málaga: la de los pagos tardíos o Montes de Málaga.

VIÑEDOS 

Los viñedos de Voladeros están en la cara norte del cerro de SANTO PITAR, un cerro situado a 1019 m altitud cuya cara sur domina el mar Mediterráneo y su cumbre alberga restos de un asentamiento mozárabe del s. X-XI. Los viñedos de este entorno eran ya muy reputados en el periodo nazarí y eran muy referidos en los s

XVII , XVIII y XIX por la calidad de su uva Pedro Ximen. “El nombrado, vistoso y encumbrado Santo Pitar o Petar (desde cuya eminencia se descubre la celebrada Sierra Nevada de Granada y otras muchas de igual o mayor distancia)”. García de la Leña 1789

Se trata de 7 pequeñas parcelas muy próximas de entre 0,3 Ha y 2 Has, plantadas entre 1902 y 1940 con un sistema de formación en vaso. Son viñedos de secano con un marco de plantación es de 3.000 cepas por Ha plantadas a tresbolillos, aunque sin un patrón regular dado lo abrupto del terreno. Una topografía extremadamente escarpada, con pendientes de entre el 46 y el 76%, obliga a realizar laboreo exclusivamente manual con técnicas de viticultura ancestral. Los rendimientos en estas condiciones son muy bajos (900-1200 kg/Ha.), pero la concentración de la baya es óptima para hacer vinos de calidad.

SUELOS

Extremadamente complejos y antiguo pues tienen su origen en la Unidad Maláguide. Predominan las filitas (pizarra de origen arcilloso) que datan de hace 600 y 500 millones de años y provienen de fondos marinos muy profundos y la grauvaca (rocas de arenisca de hace 400 a 350 millones de años). Pero también se encuentran esquistos, intrusiones magmáticas, cuarzo, caliza, arcilla y arenisca. Debido a su heterogeneidad, los suelos de los Montes de Málaga son incatalogables. Son suelos de tipo metamórfico muy erosionables y muy pobres, con tan solo un 0,73% de materia orgánica. Los cultivos se desarrollan directamente sobre la roca madre (litosoles).

VINIFICACION

A partir del mosto yema, que se fermenta a temperatura controlada en barrica de roble francés. Se somete a una crianza sobre lías en la misma barrica con banotage frecuente hasta Mayo. La estabilización se hace por frío. 8 meses en barrica de roble francés.

COMENTARIO ad hoc

Vino blanco sutil, finura, sedoso, en su punto. Amarillo limón pálido, untuoso en copa.

Seco, con alcohol bajo ( 10,5%), Cuerpo medio+, carnoso, con notas de hinojo, limón, anís, miel, piedra, menta, piel naranja, paraguayo. Intensidad medio+, final medio+.

Con arroz marinero, de sobrasada y gamba o quizá con Milhojas suave.

NOTA 92/100

ARMONIA

**Historia de su etiqueta:

Voladeros toma su nombre de la expresión popular de Málaga que designa los precipicios y cortes que abundan en nuestras montañas: «Volaeros». Se ha elegido su forma más reconocible, que también aparece como un nombre de lugar en la cartografía del área del Instituto Geográfico Nacional. La ilustración de la etiqueta reproduce fielmente un grabado de 1800 Isidoro Laurent que representa la Bahía de Málaga y los Montes de Málaga. Esta es una de las muchas versiones que se han hecho del grabado original atribuido al flamenco Joris Hoefnagel, que fue incluido en el famoso atlas Civitates Orbis Terrarum, publicado en 1572 en Amberes y Colonia.

Amarillo pajizo, con irisaciones verdosas. Nariz de pomelo, plátano y azahar, algo de brioche. Boca suave, algo acuosa, acidez importante, sabor a ananás, plátano y caramelo de limón, no muy persistente. Fino, sutil, pero algo desequilibrado: acuoso y ácido al tiempo. Curioso, fino, algo ligero.