¡Seda!.

Vino encerrado en la típica botella utilizada por esta bodega para todos sus vinos. Vestido con una etiqueta de diseño clásico y cerrada con un corcho de gran calidad. En él se significan la añada y la D.O.. Muy tintada la cara que ha estado en contacto con el vino. Está en muy buen estado.

      A la vista un color rojo picota y rubí con notas teja de capa alta. Limpio y brillante. Con una buena, gruesa, abundante y lenta lágrima en su recorrido por el cáliz de la copa. Ribete rubí y teja. ¡Ah!, sin nada de precipitación.

     En nariz apreciables frutas rojas y negras en sazón y maduras. Madera de su crianza sin aparecer y muy bien integrada. Ligeras notas de pimienta negra y madera tropical. Leves vainillas, cacao y canela.

     En boca es muy sedoso, elegante, aterciopelado, sutil, muy frutal, frutas negras y rojas bastante maduras, equilibrado, con volumen, carnoso, con los taninos muy domados y manteniendo, todavía, una fresca acidez que le puede otorgar unos cuantos años más de vida. ¿2-3 años?. Es posible y podré comprobarlo. Madera de su crianza muy bien integrada. Gratísimo, frutal, aterciopelado y sedoso paso de boca. Es un vino muy, muy largo. Me da una permanencia  de 4,00 minutos.