Unos días después...

dos botellas más disfrutadas, y bien acompañadas, en esta ocasión con queso de oveja hecho por los pastores, ya es muy dificil conseguirlos, yo más bien dirie que es imposible, tengo que recurrir a la familia y estos tienen que actuar con "llantos" y "lamentos" para conseguir unos cuantos de estas joyas.

Las sensaciones son muy parecidas a lo indicado en la valoración anterior, sólo comentar que en esta ocasión la nariz tiene mucha fruta como siempre, pero se encuentra en un proceso de maduración.

La boca es otra sobresaliente, el paso totalmente equilibrado y redondeado, los taninos vivos pero nobles y el retronasal magnifico con muchos de los arómas de la buena nariz, el final es largo y tiene una muy buena persistencia.

Es increible que un vino de 15 Euros de las satisfacciones que éste, aunque hay que comentar, que también existen otros de este precio, e incluso más económico y también son vinazos sobresalientes.