Bravura y armonía.

Vino encerrado en una botella tipo borgoñona que está vestida con una oscura etiqueta en la que predomina el marrón oscuro y el oro, con un diseño moderno y elegante. El corcho que la cierra de gran calidad, tintada la cara que está en contacto con el vino, tiene 5,50 cm. de longitud y significa la marca y añada.

     A la vista un color rojo picota-granatoso y ligeramente violáceo de capa alta. Limpio y brillante. Muy buena abundante, gruesa y lenta lágrima en su descenso por el cáliz de la copa y al que todavía, muy debilmente, tinta. Ribete granate y violáceo.

     En nariz abundantes frutas negras madura, madera de su crianza sin sobresalir. ¿Frutas cítricas?, pudiera ser.

     En boca muy elegante, opulento, con bravura y armonía, muy frutal, mineral, muy bien equilibrado, sus "casi" 15 º volumen en alcohol muy bien integrados y ensamblados. Es carnoso, con mucho volumen  y a la vez sedoso y aterciopelado. Con los taninos domándose y manteniendo una fresca acidez que invita a beber y que le otorgará varios años más de vida. Gratísimo, elegante, disfrutón, fresco y frutal paso de boca. Es un vino largísimo me da una permanencia de 4,30 minutos.