Éste fue el segundo de los vinos blancos que compramos para acompañar un arrocito caldoso de calamares y langostinos. Abrimos la botella que teníamos atemperada en la nevera, dejamos respirar por 30 minutos y realizamos su valoración a 11.5°C.
VISUAL: Bonito color amarillo en tonos limón, muy luminoso y con reflejos dorados (88).
OLFATIVA: En nariz se siente eminentemente floral apareciendo delicadas fragancias de azahar acompañadas por notas herbáceas de manzanilla y poleo. También apreciamos un punto mineral, salino y calizo. Complejidad media e intensidad media-alta (87).
GUSTATIVA: Y en boca… pues poseedor de un buen ataque, cremosito y opulento. De acidez media-alta y gran amplitud. Paso por boca seco y salino, con un retronasal que nos trae aromas cítricos y de flores blancas. Post-gusto muy amable, intenso y de buena persistencia, dos minutos y 20 segundos. Su mineralidad se antepone a todo, muy rico y de gran personalidad, impetuoso incluso acostumbrado a otros torrontes mucho menos enérgicos (89).
La RCP la dejaremos en muy muena. Cuesta al cambio 7.40 euros, pero se trata de un vino notable.
MARIDAJE: Como ya comentamos lo maridamos con un arrocito caldoso de calamar y langostinos. Una delicia de armonía entre su mineralidad y los apuntes marinos del arroz. Tremenda comilona con los colegas y la familia, buen rollito!! ):
Salud-os!!
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.