Un vino raro

Dorado anaranjado. Turbio. No es que tenga poso, es que encontramos trozos de madera.

Un vino muy difícil de clasificar. En cata ciega me resultaría imposible acertar su procedencia y por supuesto que se trata de una chenin. Es una mezcla de “orange wine” y blanco natural. También nos recuerda a ciertas elaboraciones de nuevo cuño de la zona del Marco de Jerez donde se quiere resaltar la albariza. Lleva cinco días abierto y al menos no ha decaído. Nariz curiosa: flor marchita, fruta madura, sensaciones dulces, mineralidad... Boca fresca, gastronómica y contenida de alcohol. Notable acidez. Final primario, especiado y húmedo.

Peculiar. Gastronómico. “Perrofláutico” pero sin picos raros. De perfil mortecino. No obstante, 35€ me parece demasiado, le penaliza su falta de tipicidad.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar