Un estilo que sorprende. Ya su aspecto turbio puede generar dudas si no se conocen estos vinos. En nariz despliega matices de fruta roja, sulfurosos, volcánicos y balsámicos. Es muy peculiar. En boca resulta fresco, marcada acidez, se acopló a la perfección a una gran cena mexicana. Diferente y con personalidad, pero no para todos los gustos

  Bonito color rojo cereza de capa media-baja .

 Despues de ver el color la nariz sorprende, no se espera una nariz tan intensa y aromatica. De principio aromas especiados marcados, notas florales, fruta negra y roja en alcohol, todo sobre fondo mineral con toques salinos.

  En boca buena acidez que aporta frescura. Tiene dos fases, entra facil y ligero y una vez en la boca se crece, marcados especiados, fruta fresca, sabroso, notas herbaceas, final de cuerpo medio con marcada mineralidad.

Color cereza capa media – baja, con uniformidad, muy limpio.
Muy buena intensidad, se muestra muy especiado (con pimientas negras y blancas molidas), quizás uno de los más especiados que recordamos, a la vez es sutil, elegante, floral, salino, terroso, pero la especia manda con finura, al rato y con bastante aire aparece más expresión frutal.
Sabroso, también especiado, bastante ancho, sedoso y amable, buena acidez y longitud, final especiado, terroso, frutal y largo.

En vista es de capa alta, con buena lágrima. De color rojo con ribete anaranjado.
En nariz es complejo e intenso. Muy salino y con mineralidad. Aromas a fruta roja, a especias: mucha pimienta.
En boca es muy fresco, largo, con mucha pimienta. Equilibrado. Entra suave y es agradable.