Color ambarino con reflejos dorados, brillante y precioso reflejos en la

Color ambarino con reflejos dorados, brillante y precioso reflejos en la copa, verdaderamente bonito.
Nariz muy expresiva de néctar de flores, miel, jalea real, pera madura, "peladilla", flores blancas, jazmín y leves notas de nuez moscada.
En boca es un verdadero espectáculo, densidad embriagadora que cubre todo el cielo del paladar, máxima explosión en cuanto se calienta en la boca, de esos que te hacen cerrar los ojos. Flores ahora más potentes, más néctar y menos miel, muy delicado, retronasal marcadamente floral. Larguísimo.
Maridamos con él un poco de foie fresco a la plancha y tuvimos que abandonar rápidamente el foie para centrarnos en este verdadero manjar de dioses, más que de reyes.