Que os puedo decir de un tesoro como Petrus,un vino que continua ganando con los años y que yo disfruto sin comida ni maridajes,es para estar a solas con el y saborearlo.
Un Top. sin palabras

Es igual que un 1994 pero con una concentración que aporta el grafito suave de ese año que duro verano,imagino el suelo quieto y caliente.Pero tiene esa fruta de cerezas y con rasgos de kirsh o de licor muy dulce con una admirable estructura que lo hace sabrosón, ritmico, con final seco y tremendo.

Excelente. Podria evolucionar con el paso de los años.

Magnifico color rojo cereza apicotada de gran intensidad con ribete algo teja, límpido y brillante. La nariz es un autentico perfume de viña rica, maderas viejas de iglesia, aromas de sacristía, toffe evolucionado, especiados de todas clases. Aparece la fruta de increíble calidad en compota con hollejo. Maderas aromáticas y sensaciones como de flores blancas, notas alicoradas. La boca es una mezcla de las dos anteriores ( 98 – 96 ), extrema, delicada, un magnifico posgusto especiado de calvo, pimienta negra, canela, vainilla, astringencia elegantisima, duradera, magnifica. Al final te das cuenta de que los aromas de la nariz están integrados en uno solo y que éste sigue un filo hilo conductor y que es la elegancia personificada, empieza a notarse algo de magia sensorial.