Correcto aunque con cierto exceso de resina y madera

Botella bordelesa y etiquetado típico de este vino aunque con toques de diseño ligeramente renovados respecto a añadas precedentes.

Cápsula de buena calidad y también de diseño renovado que sale perfectamente a presión con la mano.

Corcho de buena calidad, longitud media y poco bañado en vino rojo granate-picota por el interior. Apenas huele a nada (pero no percibimos defectos).

Visual

Rojo picota-cereza-rubí de capa media-alta, ribete cereza-transparente con destellos atejados, limpio, brillante y de buena lágrima, fina, de lenta caída. 

Buena visual a sus 9 años. (8)

Nariz

De buena intensidad con notas clásicas mezcladas con notas de vino más moderno.

Aparece fruta roja y, sobre todo, negra madura, resinas de pino, trufas, setas, regaliz, especias dulces, vainilla, coco, herbáceos, balsámico-mentolados, ligeras notas minerales y, más al inicio, un gran fondo de madera y barnices que lo inundan casi todo en copa. Por suerte, la aireación va a favor de este vino y con la evolución en copa aparecen las resinas y luego más la fruta, quedando la madera algo más desplazada.

Buena nariz más al final y menos agradable para mí al inicio. Mejor decantar u oxigenar con tiempo en copa. (8,3)

Boca

Ataque de cierto peso y potencia, con bastante fruta negra madura amargosa, de cierta frescura, bastante seco, de buen volumen, peso medio tirando a alto, muy buena acidez, densidad media plus, cuerpo notable y muy buena estructura. 

El paso por boca es agradable, de taninos bastante notables todavía pero que, en general, están relativamente pulidos y redondeados (aunque pueden redondearse bastante más) y con un fondo de maderas, especias y resinas muy notables que, aunque me gustan, creo que predominan en exceso en el conjunto y le quitan cierto equilibrio.

El final es, a pesar de su sequedad, relativamente carnoso, con fruta negra amargosa, mentolados, más resinas (demasiadas, EMHO), especias, vainilla y herbáceos en un buen postgusto global y una agradable retronasal balsámica, con notas de setas y, de nuevo, resinosa.

Buena boca en global, con acidez, cuerpo y complejidad pero le falta algo de elegancia, equilibrio y redondeo de los taninos. Predominan demasiado las resinas (no recordaba así añadas más antiguas como la 2004, 2005, 2006 y 2007). (8)

Su PVP ronda los 8,5-10€. Un Reserva riojano bastante económico y de correcta RCP para lo que ofrece.

Puede evolucionar bien (y quizás mejore) con 2-3 años más de reposo en botella (donde espero que la tanicidad y la madera se integren mejor aunque la fruta que le queda, inevitablemente, decrecerá).

Aunque este vino fue, hace ya 10-12 años, de  los que contribuyeron a mi afición por el mundo del vino, empieza a no decirme ya demasiado (evolución y cambio de gustos por mi parte). Por supuesto, me refiero a los "actuales" Campo Viejo (pues los históricos 64,70,73, ... esos nada tienen que ver con lo que se hace actualmente)

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar