Cae otra botella, porque Josie me preguntó que si tenía más de aquel Savagnin... Hay un toquecito de volatilidad, luego más flores que antes, miel, manzanas y algo de pudín de pan bien especiado. En boca está más firme, con cítricos muy precisos (toronja, cáscara de naranja) y la mineralidad muy enfocada. Un vino largo y excelente, del que no tocaré otra botella hasta dentro de cuatro o cinco años, lo menos.

La savagnin es una de las variedades más interesantes que conozco. Todos los vinos que he probado de ella (admito que son pocos) me han fascinado. Este de Rijckaert no me defrauda. Aromas de manzanas Empire (las rojitas neozelandesas que son un poquitín amargas), pera, toronja, lavanda y piedra calcárea. En boca es redondeado y graso, pero con acidez penetrante. Sabores a manzana, pera, lima, quenepa y tamarindo. Largo, cn un toque de miel virgen en el posgusto. Creo que esto puede envejecer muy interesantemente. Ojalá tenga la fuerza de voluntad suficiente para dejar quietas dos o tres botellas por cinco o seis años.