Magnífico comentario de Juan Ferrer, sin embargo en mi caso el medirse a ciegas con el Cheval Blanc o el Petrus no lo dejó tan bien. Color rojo picota cubierto con ribete teja. Aromas algo especiados (picantes), de civet, jenjibre, nuez moscada... Tanino de la madera muy marcado. Final algo amargo.

Vino tinto de color cereza picota, muy cubierto, sin llegar a ser opaco, ribete cereza algo más claro, pero con desacostumbrada intensidad. Lagrimas gruesas que descienden rapido tintando la copa ligeramente.
En nariz es un Gazin muy potente, más de lo habitual, con ciruelas rojas y negras,grosellas, moras, pimienta, vainilla, alquitran, humo, brea, tabaco,cedro y minerales.
En boca se muestra muy corpulento, secante, carnoso y con taninos todavía por domar, se nota la madera, pero ¡que elegancia y armonía!. Por vía retronasal destacan las frutas negras, las especias, los minerales y un toque balsamico sutil.
Todo complejidad y elegancia.