Desconcertante

Rojo rubí, ribete rojizo, capa media-alta.
Nariz de media intensidad y que nos desconcierta un poco desde un primer momento, sobre todo en comparación con el 2001. Notas de fruta negra compotada, regalices, ahumados, especias y balsámicos, más parecido a los Riojas de nuevo cuño que a lo que esperamos de un 904. ¿Demasiado joven?
En boca confirma registros pues resulta más ancho que largo, la acidez es buena pero nos deja unas sensaciones de frutas más negras y esos toques de una madera más nueva, con torrefactos y especias. Tanino todavía algo presente aunque afortunadamente sin excesos. Persistencia media.
Hemos salido un tanto desconcertados de la cata de este vino pues no tenemos claro si lo que hay es un cambio de estilo o que el vino es demasiado joven o es la añada o resulta que es un poco de todo, la cuestión es que está muy lejos de lo que consideramos un 904 y máxime catándolo junto a 2001. Veremos qué ocurre pero…

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