Botella de inferior capacidad a 75 cl, muy pesada, de base convexa, sin reencorchar. Presenta el alambrado original, con un precinto lacrado en la ase de la botella, y un nivel muy alto. El corcho está entero aunque de una longitud ridícula. Afortunadamente ha cumplido su función al adherirse a la cápsula de plomo y estaño formando un argamasa petrificada. Ahí vamos: de color rubí atejado, muy claro, de capa baja, translúcido, con gran cantidad de precipitado en forma de pequeñas láminas uniformes en el fondo de la botella. El vidrio está totalmente sedimentado, opaco, no deja entrever el interior de la botella. Poco brillo, reflejos amarronados y ambarinos. Sin borde, sin menisco, con muy poca materia colorante.

Un duermiente al que le cuesta desperezarse. De trama ultrareducida en la que se mezclan la casacarilla, frutos secos e incienso seguido de un suavísimo tostado de fondo. Muy muy reposado, dócil, sin tufos, amplificándose con apuntes de anticuario, barnices, buhardilla, y un cada vez más protagonista registro a maderas viejas, marchitos, hojarasca, tierra húmeda...

En boca no desmerece. Manso, suave, claro, limpio, algo justo de fuerza pero aún vivito. Ha superado hace años el estado de pulido para entrar en otra cosa. Los taninos han desaparecido, fundidos en un fondo avainillado colmado de térreos y vainilla. Se escapa por momentos, ligero, amable, no muy concentrado. Había curiosidad por beber un Rioja de esta edad y la experiencia ha sido buena pero para nada definitiva. No puntuamos!!

La mítica cosecha de 1904, uno de los vinos proverviales de La Rioja Alta S.A. que llevó a la bodega a dar nombre al actual 904 Gran Reserva. Tras cumplir 110 años es complicado valorar a este superviviente del siglo XX . Por una vez evitaremos eso de que "nos va a enterrar a todos"... Éste granuja ya sepultó por completo a toda su generación y ahora nos mira y se ríe de todos nosotros. Inquietante!!!

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2015/01/la-rioja-alta-cosecha-1904.html