El vino tiene una nariz intensa, compleja y sobre todo muy, muy elegante:

El vino tiene una nariz intensa, compleja y sobre todo muy, muy elegante: notas tostadas, café, chocolate, cuero fino, fruta muy madura. La entrada en boca sigue el mismo camino, te llena la boca y parece que no se tenga que ir nunca. Es sedoso, aterciopelado, complejo. Pero ... al cabo de un rato en la copa (1 hora) el vino se hunde un poco, perdiendo complejidad y armonia en la boca. Por ello le bajo algo la puntuación.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar