Freixenet en el Monsant.

Vino encerrado en una botella bordelesa y vestido con una etiqueta de diseño moderno y en la que predomina el color negro sobre fondo blanco.
A la visto bonito color rojo picota de capa media alta. Limpio y brillante. Lágrima densa, abundante y que se desliza con lentitud por la copa. Menisco rojo picota y con unas incipientas notas teja.
En nariz buena fruta del bosque, endrinas, algo de monte bajo, balsámico, pimienta negra.Madera inapreciable, está bién ensamblada.
En boca es frutal, carnoso, taninos domándose, algo de monte bajo, viva acidez y muy mineral. Correcto paso de boca. Y tiene bastante permanencia en boca, sobre unos 2,45 minutos. Un vino al que le faltan todavía unos meses de botella, pero promete.