León es una de las ciudades donde mejor se come en España y encima barato, por lo que para gastarse 60€ hay que estar muy seguro de que merece la pena.  Tras mi experiencia comiendo  en el restaurante pablo el menú degustación de julio 2020 aseguro que merece la pena.

El menú se compuso de 3 entrantes (lo más flojo) 5 platos principales y 3 postres (espectaculares). El pan muy bueno aunque escaso. (2 trozos de la Panadería Flecha).

1. Palos de pan y hojas de morcilla que la verdad no me dijeron mucho y me quedaron un poco frio.
2.  Vieira con alga codium y cítricos muy buena.
3. Presa casera con molé de lentejas (mejorable).
4. Escabeche de hígado de pato - De mis favoritos.
5. Guiso de cangrejo de río con falafel. Sabía demasiado al falafel.
6. Tallarines de setas a la carbonara.
7. Bonito del norte del golfo de vizcaya buenísimo.
8. Entrécula de vaca en su punto. LLegó a la mesa algo fría.
9. Postres a cual mejor. El Bosque de setas brutal.

No pedimos vino, la botella de agua a 3€.

Lo que no me gustó, supongo que sería puntual, que uno de los camareros fuera con la mascarilla bajada hablando con clientes. Dentro todas las medidas frente al covid - 19 eran correctas.

Volvería sin dudar. Más fotos de la comida en el Restaurante Pablo en la web.

Segunda visita a esta casa , la primera con la estrella , no note la diferencia , pero es que la primera vez ya me pareció que se la merecía , uno que es un listo….
Las dos ocasiones para cenar , también hay dos opciones , nosotros escogimos el de 50€ , hay otro de 75€ , con opción de maridaje , en los dos casos .
Además de comer muy bien , me gusta mucho la joven que se encarga del aparatado de los vinos , ya en la primera ocasión hicimos migas …
De aperitivo , ya lo describí en su día , palos de morcilla , con un crujiente a modo de hojas , currado.
Un entrante de sardina que curan en sal , añaden agua de tomate , unos puntitos de ajo negro y otros de Garum , y un buñuelo de cecina de chivo con queso de oveja muy ricos .
Rico pan y mantequilla que elaboran ellos .
Cigala, Enoki (setas) y oreja de cerdo, todas escabechadas, te negro con bergamota, Codium y huevas de trucha, EXQUISITO , cada día me gustan más los escabeches , eso si , muy sutiles .
Cangrejo de rio y congrio, con una crema de pescado, para chuparse los dedos.
Ventresca de bonito al horno , la glasean con un jugo que hacen con las pieles y espinas que tuestan con aceite de carbón , flor de sauco , almendra tierna y tomate pasificado , el mejor puto bonito que he comida en mi vida , que diría un cocinero que me encanta , jugoso , sabroso .
Pero es que también nos dieron un pase de carne muy rico , que últimamente es difícil , un rico lingote tostadito de cabrito , con una emulsión de anchoa , cebolleta francesa y menta .
Vamos al dulce , helado de amaretto , remolacha , crema agria y almendra tierna , aquí no bajan el nivel , se lo curran , tienen técnica e ideas.
Avellana, whisky y trompeta de los muertos , en gelatina, crema y helado , eso de poner un elemento salado en los postres , mola .
Y además unos petits , macarrones de fresa y bombones , es increíble , no me canso de repetirme , lo de las dos estrellas de León , es maravilloso , se come del kopon , menús de 50€ , que en Bilbao , es lo que te cuesta salir un sábado a comer , sin leches .
Para beber , no me podía fallar esa joven , un vino de un bodeguero que conozco mas de un vino , pero este ni idea , Mondo 1017 , de Manuel Cantalapiedra , ecológico y sobre todo , muy rico , para carne una copa de Rockaille Billy , original , 32€ la bebida .
Dos , de dos , que salgo encantado con el restaurante , se come de diez , se bebe de la leche , la atención de los dueños y de la joven que trabaja con ellos , sobresaliente , no se puede pedir mas y por 135€ , dos personas , difícil .

Aunque tengo pendientes anteriores comentarios, adelanto este, ya que le han dado un reconocimiento, para mi merecido.

Creo que descubrí este local por el foro o por facebook, no me acuerdo exactamente.

Pero me alegro, un local en el que se respira gastronomía desde el diseño, pasando por la cocina y la sala.

Moderno, grandes mesas, decoración y vajilla contemporánea, pero con una base de cocina leonesa de la de siempre, las personas que lo dirigen ahora son la segunda generación, Juanjo Losada en la cocina y Yolanda Rojo en la sala, hija del fundador Pablo Rojo , no le deis mas vueltas al nombre del restaurante .

Además esa noche había una joven, no me acuerdo del nombre, con mucha profesionalidad y con un gran conocimiento de los vinos naturales, que tanto me gustan últimamente, por lo que la velada estuvo feten.

Menú de 45€, es increíble la RPC de los locales de León, maridaje 25€, no lo escogí.

Palos de morcilla, un rico snack, papel de morcilla y palos de encina, también de morcilla, un trampantojo de hojas y palos.

Aperitivos, croqueta de carillera, pata y moro, encima un trozo de manzana reineta, sabrosa; rica torta de maíz rellena de aguacate y cubierta de conejita pibil, y por ultimo trucha de los picos de Europa , rodeada de pepino y con una crema agria , empezar con sabor , es garantía de disfrute , así lo fue.

Ancas de rana, plato emblemático, desde el año 1975 lo ejecutan con gran maestría, de hecho había tres señores que habían reservado para comer este plato en concreto, a nosotros nos toco la salsa que hacen con el unto añejo, pimiento verde, huevo y un rico muslito de rana, la verdad el secreto esta en la salsa, muy rico pase.

En este momento nos sacan rico pan con buena mantequilla.

Para seguir con magnifico plato, espárragos trigeros, navajas, lechuga de mar y todo ello sobre un gazpachuelo que hacen con el jugo de la navaja y cítricos, cada vez mejores pases y ya nos gusto desde el minuto uno.

Mollejas, alcaparrón, ralladura de almendra y tallarines, creo que de seta, currado y rico.

Garbanzo verde ecológico de la zona de la Maragatería, además un falafel de garbanzo, cangrejo de rio, la cola y con las cabezas hacen un rico jugo que echan por encima, muy sabroso.

Bonito braseado, pisto, huevo frito y todo ello acabado con un caldo dashi, que hacen con las espinas del bonito tostadas , agua de tomate y alga kombu , a nivel , estábamos disfrutando .

Vaca de la zona de León, sin madurar, pero muy rica, jugo de carne, pimiento verde relleno de queso fresco de la zona y una salsa de zanahoria y ajo negro, muy rica, le iba muy bien a la carne.

Ciruelas asadas al tomillo con flan de nata, los postres daban la talla, acabamos con dos cremosos de café y chocolate sobre crujiente de setas, buena combinación.

Con unos peits de chocolate que nos sacaron sobre una piña de piñones, me tome un gin con una ginebra de León, rica, 987 a 8,5€, una botella de verdejo natural de Ismael Gonzalo, Rack a 21€ y me obsequiaron con un dulce de naranja en el postre, Elemento orange, Valenciano.

Como conclusión, solo puedo sacar una, este local se merece la estrella, sin duda, solo tres mesas cenando, era un jueves de Agosto, con el tema vinos, es el que mas disfrute de mi viaje gastronomico por León, y en el apartado cocina y sala, todos coincidimos que esta a nivel de la estrella que se merecía.

Ya tenemos dos fijos en León .

En el semi-desiertico panorama de la restauración leonesa, son muy loables las iniciativas como las promovidas por este sitio, Sensa_Zone 5.2, un "espectaculo gastronómico a través de los cincos sentidos que combina, colores, música, imagen vino y comida". No direis que no pinta bien, pues eso, este año, (segundo en el que se lleva a cabo la inicitiva), no lo iba a dejar pasar, ¿en que consiste el sarao?, pues una escecie de cinco platos acompañados de cinco vinos, con música diferentes y proyección de video.
Desde que llegas al local, se nota que intentan agradarte que se toman en serio la iniciativa, y que quieren que todo salga bien, (buen detalle la "invitación" a una copa de cava mientras esperas; la cena empieza religiosamente a las 10 todos los jueves de febrero y marzo)...Pasamos al asunto, y por poneros un ejemplo, empiezan por Amarillo (convina una proyección en torno a este color con música flamenco y blues), y de comida... un aperitivo de piña y coco y un salmorejo, maridado con una manzanilla de osborne (que gusto tomar manzanilla en una comida)...original si que era, se van sucediendo los colores (verde, azul, rojo, negro) los platos, (entre los mas destacados o más me gustaros la carrilera al chocolate, jengibre y zanahoria y el postre) y los vinos.
Respecto a los vinos, soy siempre defensor de cambiar de vino con cada plato y no hacer una comida mono-botella(que vino soporta bien variedad de alimentos...champage), y aunque la idea es excelente se echaron en falta vinos de algo más de nivel (al menos un vino que sobresaliera algo más del resto, se puede hacer un maridaje excelente con poco dinero en vinos, y gastarse un poquito más en uno concreto, no fue el caso, todos los vinos y sidra que también hubo correctos, pero sin más).
La comida con altivajos algunos platos muy buenos, otros regulares y otros directamente...combinaciones muy arriesgadas.
El servicio atento, rapido (quiza demasiado), eramos solo 5 mesas incluso un poco agobiante si te preguntan despues de cada plato que como estaban se arriesgan a oir cosas que no les agranden demasiado.
En resumen una incitiava novedosa , que se agradece, aunque no se,últimamente todo el mundo quiere ser Arzak pero no encuentro unas patatas con huevos fritos sublimes.