Semana Santa del 2014.
Tras visitar varios establecimientos en la localidad de Figueres(Alto Empordá, Girona), ciudad bastante turística, nos encontramos este restaurante por casualidad fuera del entorno histórico del museo Dalí y nos arregló la estancia.
Lo que predomina en la zona, y hablo de cocina peninsular, es la cocina a la parrilla de verduras, carnes, aves y embutidos típicos, y como añadido en las cartas los huevos rotos de diferentes tipos. Para completar a las mismas hay algún plato más atrevido y ensaladas de corte moderno. Nada de lo que uno no se harte al segundo día, y de hecho algo que se puede encontrar, seguramente, con mayor o menor fortuna en el resto de Cataluña.
Pero si se busca SABOR, cocina en su punto y cocina casera-tradicional de la zona hay que buscar Can Jeroni.
La carta de vinos es más extensa que en los otros establecimientos y con la mejor representación de vinos de la zona, y tanto la comida como el vino a muy buen precio. El servicio muy bueno.
Esta comida en cualquier capital nos hubiera costado, fácilmente, 50€ pax.
Fueron 2 entrantes (ensalada tibia de alcahofas, crema de patata con huevo y butifarra), 2 segundos (riñones en salsa, carrilleras con cebollitas) y un postre, más el vino. Las cantidades más que adecuadas, nosotros acabamos muy satisfechos.
Tal vez no sea el local de moda, pero no creo que nadie se arrepienta de visitar Can Jeroni visto lo que abunda en Figueres.