Sólo una palabra, magnífico. Impresionante restaurante del centro de Roma. Sala preciosa con montaje impecable como corresponde a un restaurante estrellado. Servicio encantador, amable, profesional y cercano. Cocina creativa deliciosa con creaciones de alta cocina con producto de primera calidad y puntos de cocción impecables. Carta de vinos enorme con impresionante colección de vinos italianos pero también de todas partes del mundo, mención aparte merece el sumiller que ejerce su profesión con maestría, selección acertada y maridaje de postres muy acertado deliciosos pasitos italianos. Precios del vino 1.5-2x tienda. No es un sitio barato pero la experiencia gastronómica lo merece, para nosotros es visita obligada en Roma.

Gracias a Teresa y a Paco porque disfrutamos del sitio, que fue nuestra base para volver a ver la Fontana de Trevi que está cerquita. Un lugar encantador, con un personal de esos que uno envidia sanamente (pero que si podría los traería a todos)y la mejor sopa de castañas que he tomado en mi vida...con boletus edulis y pasta incluida. Ha sido lo que más nos ha gustado porque no tiene comparación con ninguna otra. El sabor de la sopa de castañas sigue flotando en el ambiente de nuestra memoria olfativa... Y el zabbaione, excelente. Lo de los petit fours es veritá, veritá...

Local situado en una pequeña calle del centro histórico de Roma, decoración moderna pero muy cálida, con perfecto montaje de mesas y cristalería Riedel. Servicio atento y profesional, el sumiller aparte de saber mucho habla castellano y tuvo la amabilidad de traducirnos los platos. Carta de vinos completisima y con precios para todos los gustos, me imagino que multiplican x1.5, nosotros tomamos un Brunello de Montalcino delicioso. Con respecto a la cocina decir que es la mejor que hemos degustado en Roma, platos creativos con magnífico producto y excelente elaboración, sin estridencias y con resultado final delicioso. Tiene 3 menús degustación compuestos de 4, 5 y 6 platos respectivamente, el más barato vale 65€ y fue el que nosotros elegimos, se llama la Tradizione, estupendo todo yo destacaría el cordero, el cochinillo…..en fín todo. Prepostre refrescante de pomelo y helado de aceite de oliva y postre delicioso. Café muy bueno y petit fours espectaculares. Es de no fumadores porque en Italia no se fuma en ningún sitio. En nuestra próxima visita a Roma no faltaremos. Excelente RCP.

Cerquita de Campo di Fiori un interesante restaurante de cocina creativa pero con raíces. Atmósfera relajada, decoración moderna, serivio excepcional y una cocina en la que se mima al producto aunque las presentaciones son muy modernas. Hay equilibrio y consistencia. Tomamos un menú de degustación "corto" de cuatro platos, más entrada extra y "petit fours" por 68€ que es magistral. De menos a más. Algún toque exótico, sobre todo por el uso de las especias. Magnífica carta de vinos (no sólo italianos, hay también una buena selección de franceses) y muy buen servicio del vino.