No iba a comentar la comida del jueves, pues tengo varios comentarios de este restaurante, pero es que es para comentarlo.
Es cierto, aunque 'solamente' tengo 35 años, el jueves pasado pude probar la que creo la mejor paella de mi vida, o al menos que recuerde.
Llegué un poco tarde a mesa de cinco, una altura de vuelo empezar y croquetas y pescadito frito. Estaba rico, pero dá igual, no me acuerdo ni del vino, en serio, no me acuerdo.
Paella de pollo y conejo al medio, preparada al punto, con su tabella, ferradura... la cantidad de arroz justa (justa para que nos hubieran sacado otra paella), la medida de un vasito de cortado, un poco menos... menos de un dedo de arroz, cómo es posible que no se queme??? de verdad que impresionante. Creo que no suelen hacer paella a menos que se les insista mucho, pero merece la pena.
Piña y melón para el postre.
Cafés y copas de Santa Teresa Rhum Orange y Mar de Frades.
Trato excelente por parte de Santiago y su mujer.

4 amigos nos juntamos a cenar en la terraza de este fantástico restaurante en lo que lo mejor del mismo es sin duda la calidad humana de los propietarios y el servicio tan profesional y atento de Santiago y su mujer.

Tomamos colas de rape al limón, croquetas caseras, carpacio de ternera, tartar de atún, jamón de trevelez y queso curado, sepietas frescas y una tosta por persona, yo elegí la excelente de foie con caramelo de px (sublime).

4 cervezas, 1 botella de Carmelo rodero 2006, 1 botella de Actum 2007 ( cs y merlot de utiel-requena) y cafés.

Como he dicho antes es un placer dejarte aconsejar por Santiago y poder hablar con él de cocina, vinos, ginebras, maltas, etc.

Acabamos la velada con varios GT, de diversas ginebras (martin millers, hendricks, plymuth, xoriguer...), excelentemente preparados.

El precio es sin incluir los gin tonics.

31/32 € por persona.

La relación calidad precio por el producto que se ofrece es excelente.

Sin duda seguiremos siendo clientes fieles de este excelente restaurante.

Quince personas nos juntamos para comer en Larrén. Y la comida fue espectacular.

Entrantes para todos compuesto por calamar de playa (sublime), croquetas de carabineros con espinacas (esplendidas) y colas de rape (creo).

Después plato principal donde yo elegí solomillo de ternera con foie braseado (muy bueno), cada uno su plato principal, donde me consta que todos quedaron muy contentos.

Postres, tomé tarta 3 chocolates (muy bueno) y cafés.

Para beber: cervezas, coca colas, aguas, 2 botellas de baltasar gracian, 1 de valtosca, 1 de martinez lacuesta y una de blanco clos de les valls.

Servicio muy atento y amable, y un placer charlar con el propietario que se nota que le gusta el mundo de los vinos, ginebras, maltas y demás. Trato excelente. Acabamos cerca de las 6 de la tarde.

Volveremos.

Ayer volvimos a Larrén (otra vez) y otra vez espectacular.
Nos juntamos tres ‘Pepes’ y empezamos con un par de ‘Ambar caesaraugusta’, una cerveza que aún no había probado. Cerveza de malta de trigo de doble fermentación a alta temperatura, muy turbia que fermenta en botella y que deja mucho poso, me encantó. También una A.K. Damm. Uno de los Pepes escogió para beber ‘Gramona Gessamí’ D.O. Penedés que se elabora con Muscat de Alejandría, Sauvignon Blanc y Muscat de Fontignac, muy agradable y servido a temperatura correcta.
Para comer, una ensalada de tomate, atún y anchoas de 10. Pan tostado con tomate y aceite. El aceitito es Masía del Altet, de la serra de Mariola, muy bueno. Como principales, un par de Dentón a la plancha y un solomillo con foie con reducción de PX, patatas fritas y pimientos de padrón. Todo muy bueno, materia prima excelente.
De postre compartimos tarta de tres chocolates. Cafés, y copas de Santa Teresa Rhum Orange y orujos de café.
Trato excelente por parte de Santiago y de su mujer. Larga sobremesa y encantado con la compañía.
No anoto el precio, porque no pagué. Suele salir la ‘broma’ entorno a los 35€, muy buna RCP.
Volveremos pronto.

Cuarta vez que acudo a comer a Larrén y siempre salgo satisfecho.
Local curioso, lleno de botellas de mil tipos de vinos, licores y aceites, sólo pienso, como alguien tropiece, se arma la de Dios…
Al final por problemas de trabajo no acuden todos los comensales citados (si el trabajo fuera tan bueno, los ricos se lo quedarían para ellos) y comemos mi amigo Pepe y yo, mano a mano. Mientas lo pensamos Tomamos una A.K. Damm y yo escojo ‘Altura de vuelo’, una cerveza artesanal de Casas de Rey. Aquí tengo que declararme fan incondicional de Herbu, por eso elijo esta cerveza que describe magníficamente en su web (http://www.ojoalplato.com/archives/1297), así que yo no comento nada de ella porque el maestro ya lo dice todo (me gustó mucho), no sólo leo sus comentarios en Verema y en su web, ojo al plato, sino que le envidio y nada de envidia sana, es casi ojeriza, siempre disfrutando de excelentes comidas y cenas , ale, ya lo he dicho.
Escogemos una ensalada de tomate con bonito y anchoas. Excelente materia prima sobretodo esas anchoas y ese aceite de Mariola. Pan tostado con aceite y tomatito.
Cazuela de arroz meloso con alcachofitas, boletus y pollo campero del Valle del Esla (estupendo).
Siempre pedimos Carmelo Rodero, pero esta vez cambiamos a Finca Antigua Merlot 2005 (D.O. La Mancha), que no conocía y me ha gustado. Servido a temperatura correcta en buenas copas, si acaso un poco pesadas.
De postre escojo helado de lima con albahaca (muy bueno).
Café solo y copa de Santa Teresa Orange.
Trato muy profesional y amable, local familiar que te hace sentir como en casa. Gracias Santiago por el trato y gracias Pepe por otra agradable comida.
Un pero, las sillas no son todo lo cómodas que debieran, si se alarga la velada…

Volvimos, esta vez a cenar. La verdad es que no falla, siguiendo la misma forma de hacer las cosas que la última vez.
Para empezar tomamos unos Vermouth Perucci tinto, luego Santiago nos ofreció una nueva carne; nos informó que la había incorporado hace poco, era originaria de Texas, de la raza Longhorn ó cuernos largos. Por los comentarios anteriores, queriamos probar la del Valle del Esla, pero nos decantamos por probar la otra. Estaba buenísima, sobre todo la buena digestión que hace, que él ya nos comentó.
Empezamos con unos esparragos navarros con una vinagreta de verduras (sabrosísimos), una ensalada estilo Larrén y unas croquetas de lubina con erizo de mar (buenisimas).
Cerramos la cena con un queso curado de leche cruda del valle del cerrato.
Tomamos un vino Labor del Almedeque especial Merlot, y un Estrecho de E. Mendoza. Para 4 personas. Cafés, gin tonics bien preparados de G`Vine y Bloom.
Repetiremos.

Larren es un restaurante familiar de cocina de mercado, poco elaborada pero muy bien resuelta. El local es acogedor, con multitud de botellas a la vista y cuadros, carteles y espejos de marcas comerciales. Buena manteleria y coperio correcto, encontrando el mayor defecto en las sillas, las cuales considero poco apropiadas. Carta a base de entrantes, un par de ensaladas, tres arroces y pescados y carnes. Algún plato fuera de carta. Optamos por comer al centro, con ensalada de perdiz ligeramente escabechada, aliñada con aceite Valseco (12€) muy buena, carpaccio de solomillo (12€) muy bueno aunque con demasiada mostaza, surtido de croquetas (6€) queso, jamón y pescado muy correctas y revuelto de habitas baby con boletus (8€) muy recomendable. Carta de vinos con predominio de Rioja, Ribera del Duero y Valencia. Referencias para todos los gustos. Algunos vinos bien de precio, y otros demasiado elevados. Optamos por un Beryna 2006 (18€). Café correcto (1,50€), pan con tomate y aceite (0,80€). Restaurante de barrio venido a más. Recomendable.

No hace ni cuatro meses que vine, pero vuelvo porque me gusta.
Todo sigue igual, buena materia prima y buenas elaboraciiones.
El servicio impecable y atento.
Sigue impresionandome la carta de postres, no por lo extensa, sino por el nivel de su contenido.
Tomamos una ensalada de la casa, acompañada de Vol Damm y AK Damm, después también cayo una Inedit.
Después croquetas de marisco, jamón, queso y merluza, a cual de todas más buena.
Unas patatas bravas, capricho del día y después unos arroces de pollo campero del Valle del Esla. ¿Que cosas! Primero fue la ternera, ahora el pollo. El arroz estaba bueno, y además deshuesado.
De postres tartas y helado y vinos dulces, PX de Lustay y vino de hielo de Gramona de la variedad gewürztraminer.

Comida de familia el sabado a mediodia ,solo eramos dos mesas ,fuimos atendidos perfectamente,Nada que añadir a los antiguos comentarios sobre la carta en especial la de vinos y licores .De aperitivo clochinas valencianas ,muy naturales y frescas,tosta de queso del casar y patatas picantonas .para terminarcon una paella de marisco pelado estupenda muy finita y buen sabor. De postre dos sorbetes y tarta de tres chocolates.acompañado de varias mistelas y gintonic de cinderelle .Buena rcp

Buena materia prima, buen tratamiento, calidad en general y precio ajustado.
Restaurante bien acondicionado, aseos de los más impecables de Valencia, personal profesional y entendido.
Carta sugestiva, buena bodega, carta de postres que sorprende, con vinos dulces, maltas, licores y ginebras, gin tónic bien preparado.
Tomé corquetas de marisco, con sabor a marisco, tostas de queso de la Serena, con huevos de codorniz fritos, y de plato pincipal entrecot de ternera pastuenca del Valle del Esla, 400 gramos de entrecot por 20 euros.
Vino Tagonius, cerveza Inédit, ginebras para elegir entre una docena al menos.
Buena RCP.

http://www.ojoalplato.com/archives/1349