No sé si me produce más emoción descubir un nuevo y maravilloso restaurante, o comprobar que los que vas visitando año tras año, siguen mateniendo el listón. Este es el caso del asador Galartza. Misma calidad en txuleta, pikillos (aunque en esta ocasión necesitaban más tiempo entre los fogones), y otros deliciosos platos que no habíamos probado allí como el foie (un pelín dulzón con tanta salsa, pero delicoso). Antes de entrar en el restaurante nos tomamos una sidra sentados en los bancos que tienen en su pequeño, pero cuidado jardín (nos supo a gloria). Dentro Ladis Galartza nos atendió como siempre, y pudimos ser testigos de excepción de una comida de Retegui II con dos periodistas del País, y con la incorporación de Galartza III una vez había acabado de atender a las mesas. Luego Ladis nos comentó que les estaban haciendo una entrevista a los dos, que saldría publicada más adelante. Historia gloriosa y años dorados de la pelota en la mesa de al lado, y posterior siestecita en un espectacular prado entre las hayas de Aralar ¿Quien da más?

El Expelotari Galartza III cuenta con un restuarante acorde con la privilegiada comarca en la que se encuentra. En pleno corazón de Aralar, y a 5 minutos en coche del espectacular mirador de San Miguel de Aralar, se encuentra un caserón coqueto con una cocina de montaña, sin mayor sorpresa que el mimo que se intuye en la selección de su materia prima y en el cuidado de la misma en sus fogonoes. Las alubias rojas acompañadas con unas guindillas con sal, el chuletón poco hecho (se agradece), o unos deliciosos pimientos del pikillo son platos que alegran los días de invierno... y de verano. No se descuidan los postres y la carta de vinos, que aunque clásica goza de buenos caldos de la zona y de las principales DO. Su comedor es acogedor y permite prolongar la sobremesa. Ideal para posterior siesta en el maravilloso hayedo camino de San Miguel. Lo sorprendente es que no se conozca más.