Pasando unos días por Madrid, estuvimos en El Enfriador que, por lo que veo, hace tiempo que nadie se acuerda de ellos. Y merecen ser recordados.

Estuvimos este sábado con un día desapacible pero con el local lleno a reventar. La fórmula sencilla, una oferta clasica con un nivel de calidad alto y un servicio atento y diligente que le da un punto excelente.

Vinos por copas, siguen tirando de magnums ,a mi siempre me han gustado, una cervezas bien echadas y una oferta de tapas, ensaladas, tostas y conservas, optimas para quedarse en los vinos a hacer una incursión en una cena ligera con atractivas opciones.

En nuestro caso: media ración de ensalada de tomate y ventresca, con una vinagreta fresca y en su punto de acidez, los tomates raf muy dulces y la ventresca jugosa. Un 9 sobre 10.

Seguimos con una atún con salsa de soja y sésamo que estando muy bien tras la ensalada quedo en un segundo lugar.

Cuatro copas de vino, un Izadi, para mi gusto alto de temperatura en copas correctas. Los vinos con su tapa de papas queso o embutido, generosas e inmediatas.

Es llamativo ver como entre dos camareros atienden con rapidez, diligencia y efectividad un local permanente lleno con las gente entrando y saliendo, en barra o en minúsculas mesas redondas altas, y no muy estables de mármol blanco, peor siempre correctos de un buen humor que parece que se transmite a toda la clientela.

Desde luego, si estáis cerca no dejéis de pasar y conocerlo.

Local con mucho ambiente, no muy grande. Se puede pedir en la barra o intentar coger alguna de las mesitas con taburetes.
Servicio muy atento, y por supuesto eficiente.
Se puede pedir entre raciones, tostas, empanadas de Cedeira o alguna lata de conservas "artesanal" (mucha variedad).
Para 3 pax:
Una de sardinillas en conserva sobre unos pimientos de piquillo asados muy ricas.
Una lata de mejillones en escabeche (6-8 uds) estupendos.
Una lata de navajas al natural que pasaron un poco más desapercibidas.
Una tosta de salmón con brie fundido, sabroso.
Una tosta de trigueros con un poco de queso de cabra gratinado, muy rico.
Una tosta de hígado de rape con un chorrito de acite, sublime.
Una tosta de boquerones, bien.
Una ración de empanada de zamburiñas muy rellena, pero la masa, para mi gusto, un pelín gruesa.

Para beber tienen algunos vinos por copas. No hay gran variedad, pero entre otros estaban Briego de la Ribera y Piérgola de La Rioja. Me llamó la atención que utilizan formato magnum. Vi copas aceptables y cierto mimo en la temperatura del servicio. Solo tomamos cervezas en esta ocasión, por lo que no puntúo tema de vinos

Precio total: 55,60€ (inc. 4 cañas dobles y dos refrescos)

El martes 31-3-09 volví a comer al enfriador, esta vez José no se prodigo demasiado lo justo tal vez pero el sabor de boca final impresionante. Unos mejillones de 3-4 piezas por lata, jamon del de siempre: espectacular, medias rodajas de tomate cortado fino debajo de unas antxoas,que si no eran del cantabrico(llevamos 2 años sin que entre una sola antxoa) eran de cerca regadas con un aceite de pelicula y un vinagre de vino de jerez servido en su justa medida y como estabamos medio de dieta una ensalada de tomate con perdiz escabechada para no olvidar. estuvimos catando unos vinos de bodegas los aljibes con el propietario de la bodega, manuel chaval joven, educado humilde y tremendamente ilusionado con su bodega y sus vinos,es para estarlo; de los tres destacar por encima de una media altisima un rosado de shyraz. yo tome una copita del rioja de la casa: Fdez de Pierola crianza 2005 formato magnum,una de las bodegas revelacion de rioja en los ultimos años. muy buen vino sevido en un formato perfecto para el vino por copas en un local con rotacion de producto como es el caso de el enfriador. Enhorabuena José y sigue asi

Local decorado al estilo de las clásicas cervecerías madrileñas, tiene además de la barra unas cuantas mesas y una concurrida y animada terraza en verano.

La cocina está basada en una serie de tapas de gran calidad, destacando unas conservas de prestigiosos elaboradores, unas magníficas empanadas de Cedeira y una serie de tostas variadas todas ellas muy sabrosas. Además ofrece una excelente selección de ibéricos destacando un enorme "bellota" extremeño.

Para beber hay una quincena de vinos por copas no muy interesantes salvo los jerezanos, con un magnífico fino de El Maestro Sierra. Cerveza bien tirada y vermouth de gran calidad. Pero lo mejor es la posibilidad de poder tomar los VORS de González Byass en media botella, algo realmente único en Madrid. Coperío correcto.

Una taberna clásica, concurrida y bulliciosa donde siempre vas a tomar algo y siempre acabas saliendo "comido". Lo cierto es que probar su excelente jamón con media botellita de Palo Cortado Apóstoles es una experiencia religiosa que recomiendo fehacientemente. Todo un clásico en el barrio de Chamartín.