Despues de haber leido los comentarios, que por cierto son justos, decidi reservar una mesa para tres.
Servicio agradable y attento, aunque tuvimos que esperar un poco entre las entradas y los segundos platos. Compartimos de entradas muy buenas mejillones y croquetas. Luego elegimos bacalao al horno con una salsa de ajo y tomate, parillada de pescados y carre de cordero. Materia prima de buena calidad y cocida perfectamente.
De vino tomimos una botella de Chardonnay del Emporda, estaba bien pero al principio se notaba demasiado la crianza en barrica y habriamos preferido beberlo en copas en vez de vasos.
Con la calor no teniamos tanto apetito asi que no pudimos probar los postres y preferimos tomar un cafe.
Teniendo en cuenta la preciosidad de la vista y del entorno, la buena calidad de una cocina tradicional, la relacion calidad precio es correcta.

Casa Nun está ubicado en una antigua casa frente a la playa de Cadaqués. El interior conserva todo el sabor de una tierra de marineros y artistas, en el exterior tienen una terraza con fabulosas vistas al mar. La cocina es tradicional y en ella destacan, como es normal, los pescados.

Fuimos a cenar cuatro personas y optamos por compartir unas verduras a la plancha y unos quesos. Los dos entrates estaban muy bien en cantidad y calidad. Por cierto, también tienen una buena oferta de quesos para tomar de postre.

De plato fuerte, mi elección fue un rodaballo al horno con patatas... exquisito! Un plato bien cocinado y bien presentado. Todo muy sencillo, pero correctísimo. Cabe destacar que ofrecen arroces y fideuaes para una sola persona, la cocinan en paellas para 2 y por lo que comprobé quedan la mar de bien.

La carta de vinos es amplia, con muchos catalanes. Los conservan en un armario de madera sin ningún tipo de refigeración. De hecho nosotros pedimos un tinto y estaba bastante calentito, lo dijimos y enseguida sacaron una manta enfriadora. Lo sirvieron en vaso.

Los postres no llegamos a probarlos, ya que las raciones son abundantes y nos pasamos un pelín.

El trato muy bueno. Algo lentos al principio, pero cuando empezaron a servirnos todo fue al ritmo adecuado. Sencillez, buena materia prima y trato amable... Merece la pena.

Tras leer la valoración de Antoni_Alicante nos decidimos a comer de forma económica en este restaurante, el menú turístico: ensalada con atún, nada del otro mundo, pero correcto; paella mixta para dos (es el mínimo para servir este menú), abundante paella de la que salen 3 platos, muy sabrosa; Chardonay 2008 del Penedés; aceite de oliva virgen, vinagre de Módena y molinillos de sal y pimienta en las mesas son un detalle que nos gustó; pan y mantequilla (detalle por su abundante clientela francesa). Poder comer bien con ese precio un día festivo en un lugar tan bonito y turístico es un lujo.
Los precios de la carta son algo más caros, segundos platos de 20-30 €, por ejemplo, pero viendo la calidad del servicio y del producto, no es una opción a descartar para otra visita.
La mantelería que vimos era de tela, servilletas incluidas, pero en vez de copas vasos bajos, curioso.

Lo mejor de este restaurante es el entorno: en el bello pueblo de Cadaqués, junto al puerto, ligeramente separado de las grandes terrazas comerciales, en una casa que rebosa ambiente marinero por los cuatro costados (paredes encaladas, mederas azulonas, saloncetes pequeñitos, escaleras empinadas...). Mantelería (de papel), vajilla y cristalería dejan bastante que desear.

Tomamos menú del día (19 €). Los precios de pedir "a la carta" resultan bastante altos. Dos platos, postre, pan, café y bebida, todo incluido, como antes, je je. Buenísmo el gazpacho andaluz y correcta la ensalada mixta. Muy frescos los pescados (sardinas y salmón). Se presume calidad en todos los platos de la carta pero que nadie busque sofisticaciones o presentaciones espectaculares.

La carta de vinos correcta, con representación de varias DO en blancos, rosados, tintos y cavas. El servicio se presume atento y amable pero un día de agosto con el restaurant a tope no es el mejor momento para saberlo.