No está mal

Lo mejor de este restaurante es el entorno: en el bello pueblo de Cadaqués, junto al puerto, ligeramente separado de las grandes terrazas comerciales, en una casa que rebosa ambiente marinero por los cuatro costados (paredes encaladas, mederas azulonas, saloncetes pequeñitos, escaleras empinadas...). Mantelería (de papel), vajilla y cristalería dejan bastante que desear.

Tomamos menú del día (19 €). Los precios de pedir "a la carta" resultan bastante altos. Dos platos, postre, pan, café y bebida, todo incluido, como antes, je je. Buenísmo el gazpacho andaluz y correcta la ensalada mixta. Muy frescos los pescados (sardinas y salmón). Se presume calidad en todos los platos de la carta pero que nadie busque sofisticaciones o presentaciones espectaculares.

La carta de vinos correcta, con representación de varias DO en blancos, rosados, tintos y cavas. El servicio se presume atento y amable pero un día de agosto con el restaurant a tope no es el mejor momento para saberlo.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar