Ay....esas expectativas que malas pasadas juegan.Reserva realizada con casi 2 semanitas de antelación,horario de la reserva: 20:45horas,noche de Halloween.Y la primera en la frente,20 minutitos de plantón hasta que abren las puertas.Ninguna explicación, no pasa nada,estamos cargados de energía positiva,hemos realizado una porrada de kilómetros desde Huesca y estamos dispuestos a disfrutar.Nos gusta el vino,y nos gusta mucho,pero el día ha sido largo,muy largo,y una botella de vino se me antoja excesiva.Se lo comento al camarero pero solo me ofrece la triste opción de tomar un ribera del duero con 5 meses de crianza.Va ser que no,pido la carta de vinos,me cuesta leer los precios,pero no lo suficiente para darme cuenta de que están subidos,subidos...un ejemplo:viñas del vero de esa uva de escritura imposible a 25 euros,en tienda 9 euros.Opto por un pétalos del Bierzo a 29 euros.Voy al servicio,cuando vuelvo me encuentro la botella abierta,y al sumiller decantando el vino,un vino del 2012,algo raro,pero el experto es el,no hay comentarios acerca del mismo.
Empezamos,aperitivos de grandisimo nivel de corte afrancesado(foie,queso,terrina...),geniales.A la altura de cualquier grande.
Caballa,lechuga,leche de tigre,viajamos a Perú. Notable versión de la alta cocina sudamericana.
Viera,langostino,melocotón. Producto,cero riesgos,cocciones adecuadas,simple y sin mucha historia.Presentacion de las del gusto michelin,puntitos,polvos y vajilla.No hay nada que amalgame los sabores y falta un hilo conductor.
Arroz,placton.Las ideas del chef del mar,en la salita.Correcto pero no excelso.Ni frio ni calor.
Granizado de gin tonic.Ni más, ni menos.
Equivocación en la carta,creíamos que íbamos a tomar pato y verduras ahumadas, y nos encontramos con esferificaciones de cebolla e idiazabal,garrofon y jugo de trompetas de la muerte.Rico,sabroso.Nos gusto.El idiazabal se lleva por delante el garrafon. Jugo de alta cocina.
Corzo.Gran plato,plato de nivel de sabores otoñales contrastados...castañas,cassis,regaliz y caza.Ración muy escasita,una pena.Buena mano en la cocina.A nuestro humilde entender las perlitas de foie,sobran.
Setas dulces.Presentación curiosa,infantil.Texturas poco logradas,cristalización interior,todos los dias no son iguales pero lejos del nivel de restaurantes con esa gama de precio.Flojo.
Petit fours,no nos los explican.Un conito de chocolate muy rico,una especie de rosquilla de almendra que alegra la cara,flojita la galleta de jengibre( las he probado muchísimo mejores en países anglosajones)y he olvidado el último.
Mi mujer pide ver a la chef, el camarero nos comenta que no puede ser, esta trabajando.No pasa nada, lo entendemos.Servicio rápido y eficiente,sobrio.Quizás y solo quizas...algo frío,pero eso ya es cuestión de gustos.75 minutos después estamos en la calle,todo muy rápido...y 120 euros menos.Buena cocina,pero mucho menos riesgo del esperado,buscaba picantes,ácidos,puntos dulces y encontré una cocina sin un hilo conductor claro pero apta para todos los públicos y a un precio razonable.Probablemente las altas expectativas me jugaron una mala pasada.A pesar de todo,recomendable.Teníamos un largo camino de vuelta, y no creo que pasaramos mas de 5 minutos hablando de la cena,extraño en nosotros.