Cuando cerraron el Ginger Loft me lo lamenté mucho, muchos momentos de felicidad degustando las comidas de Mike, con ese toque tan fino, con especias milimétricamente ajustadas que te trasladan a cualquier parte del mundo y, por si ello fuera poco, acompañado por los exquisitos cócteles de Santi que, sin duda, son los mejores que he tomado en Valencia. Hace un mes me enteré de que lo habían vuelto a abrir con el nombre de Baat Valencia, me alegré un montón y acudí rápidamente, era Domingo y me pedí los huevos Benedict del brunch, ¡qué exquisitez!...
Además hay que añadir que la simpatía de Mike y de Santi es indescriptible, el sentido del humor del que siempre hace gala que te contagia y transma los comidas en una tertulia que se alarga de lo bien que lo estás pasando, con esa sensación de que los problemas desaparecen o que te dan igual, de esos momentos inolvidables de gastronomía y felicidad que, afortunadamente podemos seguir teniendo con sitios como Baat Valencia.
Un sitio imprescindible, al menos en mi vida.
Nota: veo que en la encuesta solamente puedo opinar acerca del "servicio del vino", y no de la "bebida". Entiendo que lo del servicio del vino es clave en un restaurante pero la encuesta no queda completa si no si pone lo de la bebida -hay otras bebidas además del vino-. En el Baat la carta de vinos es breve pero, sin embargo, el servicio de cócteles es EXTRAORDINARIO. Es una delicia, por ejemplo, degustar el curry de gambas de Mike con uno de los cócteles de Santi.