En circunstancias normales no colgaría este comentario. Me he dado cuenta de que la comida es la misma que en mi anterior visita.
El hecho de cambiar de aoompañante me hace quedarme en sus manos y la elección, curiosamente ha sido la misma.
Pero estando donde estamos y sabiendo la importancia que se da aquí al asunto vinícola, creo que merece la repetición.
Hoy me acompaña mi retoño y como no ha visto la bodega, Jon Andoni nos la enseña de nuevo. Una maravilla. 1400 vinos diferentes. Ordenados por procedencias. Diferenciación de espacios. Los tintos, los blancos…. Demasiadas opciones. Uno quisiera probarlo todo….
Así que subimos a la mesa, la misma de nuestras últimas visitas. De tamaño magnífico y estupendamente vestida. Aquí se está cómodo, muy cómodo. Entorno agradable y acogedor.
Aparece Jon Andoni con unas cuantas botellas distintas pero al escuchar que mi hijo disfrutó este verano mucho con un Mar de Frades, él mismo nos dice que nos bebamos uno en concreto.
Eladio Piñeiro, fundador de Mar de Frades, por motivos familiares tuvo que abandonar su trabajo y se dedicó en cuerpo y alma al amor de su vida. ¿Película? No, realidad, lo que uno lleva buscando toda la vida. Un abrazo desde aquí, Eladio.
Hemos tenido el privilegio de bebernos su primer vino selecto. Un Frore Do Carme, imaginamos que en honor a quien fue su pareja. Cosecha 2005.
Preciosa botella. Etiqueta que nos dice por su cambio de color si el vino está más o menos frío. Curioso detalle que desconocía.
Desde que lo hemos abierto, decantado con esmero por nuestro magnífico sumiller, ha ido cambiando poco a poco. Si lo catásemos a ciegas, diríamos incluso que hemos bebido dos vinos distintos. Magnífica acidez que no notamos pues al parecer está bien integrada. ¿El precio? 22 euros iva incluido, creo que es un verdadero regalo.
Nos ofrecen un aperitivo en forma de pequeña tacita de sopa de pescado. Se agradece. Más crema que caldo. Rica, muy rica.
Quiero que el txikito prueba sus croquetas. De las mejores que he comido nunca. Del tamaño ideal, de bocado. Sabrosas, crujientes. Fluídas. Están impresionantes. Las habrá parecidas pero mejores…… difícilmente.
Unos hongos negros salteados, emplatados individualmente son nuestra segunda opción. De nuevo un producto de diez con un resultado de la misma nota.
Había “negociado” con la “jefa” el pescado. Palabras textuales suyas: os saco dos raciones. La leche que la dieron….. nos saca un elegantísimo rodaballo que pesa bastante más de un kilo. Acompañado de sus correspondientes patatas panaderas, tomate y unos maravillosos ajos bien turraditos. Con lo que me molan.
El pescado bien servido por la moza que nos atiende. Se nota que sabe lo que se hace. Esa gelatina….ese sabor, ¿Qué no tiene sabor este pez? Una leche.
Casi demasiada cantidad después de lo degustado con anterioridad.
Y llegarán los “listos” de turno y dirán que es caro. ¿Caro? Caro es comer basura por un euro. Esto es justo, calidad de diez, tratamiento de diez, satistacción de diez.
A mi no me entra postre alguno. Me gustaría pero uno da lo que da. Y el mozo se pide un sorbete de mandarina que me “deja” probar y está para beberse un par de litros. Sabe a mandarina, refrescante, sin esa sensación “acuosa” de muchos.
Como no podía ser de otra manera, allí que me aparece el susodicho con un vinito de postre. Hoy concretamente es un vino alemán. Perdonen mi supina ignorancia pero tampoco puedo decir gran cosa. Un Barzen Eiswein, un riesling cuyas uvas se recogen con alguna peculiaridad pero que no se explicar. Demasiada información hemos tenido hoy. Yo lo he disfrutado inmensamente. Mi hijo no es de dulces y termina lo poco que queda del escelente albariño.
Salimos a la barra de la entrada. Tomo mi cafecito y nueva charla. Dice mi hijo que pocas veces en su vida le han tratado así, que está comodísimo. Que se siente muy a gusto. Pues ya somos dos.
De nuevo gracias a todos por ser como sois, gracias por emocionarnos.
Para ver, que no puedo decir disfrutar, las fotos: http://gastiondo.blogspot.com.es/2015/09/restaurante-remenetxe-muxika-gernika.html