Cisne cuello blanco

Como siempre un placer y un privilegio el poder participar en la cata virtual, una ginebra singular de la mano de dos tónicas únicas, junto a la compañía de los compañer@s de Verema.

La ginebra sola se comporta de forma elegante y clara, es balsámica, con potencia y con equilibrio, el alcohol se resalta, pero no es nada ardiente o hiriente. En la nariz denota que es una ginebra fresca, clara y honesta, predomina el enebro pero arropado en un baño de aceite de cítricos: (kumquat,Calamondín), percibo también hierba fresca. Hay un fondo seco, profundo y agradable, perdura...

En la boca es densa, con un punto glicérico, predomina el enebro como lo hace en nariz, a mi personalmente me gusta, engancha, lo bueno es que cede paso o se une y entrelaza con un fino amargor de naranja, casi confitada y con unos toques de pimienta blanca junto a unos suaves y delicados apuntes de vainilla. El final es una buena combinación de calor y de frescor.

Con la tónica indian tradicional los sabores se entremezclan perfectamente, tanto el enebro que queda más equilibrado y los cítricos que ganan en frescura. Quedan en un segundo plano unos toques amargosos, sin molestar en ningún momento, hay una perfecta armonía entre la mezcla, aunque para mi gusto, queda quizás un poco dulce.

Con la tónica light es donde se marca la diferencia, la ginebra es mas expresiva y gana en matices, se potencian los botánicos, al ser la tónica menos dulce deja paso a la ginebra y en vez de unirse a ella la acompaña. Y como muy bien han apuntado, surge un punto salino que marca y diferencia, la personalidad de esta tónica, que de light, nada. Buena sinergia juntos pero no revueltos.

Nada que quedo encantado con la cata, con la locura de estos tres personajes, que han llevado acabo una serie de productos, fantásticos y que completare este fin de semana en compañía de los amigos. Cisne cuello blanco...