Nos trajeron unos amigos esta botellita de ron para la sobremesa de una paellita en mi casa. Se trata de un ron elaborado en Cuenca (la ciudad donde resido en Ecuador), con crianza en barriles de roble blanco americano. En su día probamos sus hermanos mayores, el  San Miguel Solera 1952 y el San Miguel black , muy ricos ambos. Metimos la botella en la nevera un ratito y procedimos con su valoración a unos 7-8°C.

VISUAL: De color amarillo dorado con reflejos aceitosos, muy bonito. De lágrima abundante, fina y transparente (87).

OLFATIVA: Desprende aromas herbáceos de heno e hinojo de entrada. Agitamos y asoman fragancias florales de jazmín y rosas rojas. Al rato se aprecian notas de fruta tropical, plátano y piña, junto con apuntes de frutos secos (avellana). Muy fresco aromáticamente, con el roble presente pero muy sutilmente. De intensidad media-baja, quizás por su temperatura, pero de notable complejidad (88).

GUSTATIVA: Nos refrescamos las papilas con nuestro vasito de agua fría. Cremosito en boca, licoroso, con un paso por boca muy fresco, con recuerdos herbáceos de hierba húmeda y con notas florales. Nos da la sensación de ron alegre y joven, lo que es realmente. En retronasal hay un puntito avainillado y en el post-gusto de nuevo algo de frutos secos, de plátano y un ligero recuerdo amaderado, a roble. Sin muchas pretensiones, resulta un ron fresco, jovial y divertido (87).

La RCP me parece muy buena, cuesta apenas 8 euros la botella.

MARIDAJE: Nos lo tomamos en las sobremesas, acompañando siempre un buen chocolate. Rico, rico.

VIDEOCATA:  https://youtu.be/Zd48Vo72zKs

Salud-os!!