Tres días a media pensión 42,5 Euros/día.

Localización a cien metros escasos del palación de deportes de Platja d´Aro.
Instalaciones: Tiene piscina, spa, gimnasio. Ninguna de ellas la utilizamos ni visitamos.

La recepción: Bien, más extranjeros que españoles, pero normal, nada del otro mundo.
La habitación: Amplia, con terraza, cuarto de baño con bañera. TV de 19" de tubo. El cuarto de baño con poca luz. Antiguo pero aceptable. Dispone de la nevera del mini bar vacia y cerrada. Eso si previo alquiler de 5 Euros y fianza de 20 te dan la llave. El aire acondicionado muy bien, no como en otros hoteles que cuando lo apagas te quedas igual porque el general no lo apagan (lo más destacable del hotel). Dispone de armario empotrado, el cual una de las puertas montaba sobre la otra, sin cerrar adecuadamente. La limpieza de la habitación, en principio te realizaban la cama y no se si la limpiaban porque debajo de la cama en semanas que no habian ni pasado la escoba. Pero de apariencia no se veia, parecia limpia.

Y por fin el ¡¡¡restaurante Bufet!!!:

Parace que cocinasen para diabeticos e hipertensos. Con decir que lo mejor del bufet eran las patatas fritas y la fruta de postre. Por suerte estaban las fiestas de la cerveza y habien montadas casetas donde hacian torra de embutidos, delante del palacio de deportes. ¡¡Que bones les butifarres!!.

El desayuno: variedad a elegir, salado, dulce, y cereales. De salado, el tipico huevo frito, salchichas franfurt o mini salchichas, beicon, "fesols"(frijoles). Pan, bocadillitos pequeños cortados ya por la mitad, una salsa de tomate (que no me atrevi a probar), algo de fiambre pero muy poco. De dulce un par de biscochos, blanditos pero que te secaban la boca y sin sabor, un bol con yougurt, madalenas(estas estaban buenas) y croasanes tipo de bolsa de mercadona, mermeladas de fresa, melocoton, ciruela y naranja, miel y crema de cacao. Las mermeladas bastante malas al igual que la crema de cacao. La miel bien.

Tenian leche, cafe y infusiones.

Los zumos, otra cosa que más bien no probar. A parte de ser los tipicos que vas a la maquina le das al boton y encuentras de entre toda la variedad alguno que se asemeja a algo que te lo puedes beber a gusto, en este caso ninguno merecia la pena, eran agua con azucar, colorantes y aromas. Bebimos agua.

Ponian fruta: Manzanas, peras y naranjas.
Perdon también tenian pan de molde y una maquina para tostar.

La comida o cena: La bebida no entraba en el bufet. El agua a 1.25 el litro. Haber por donde empiezo.

Entrantes: distintas ensaladas ya hechas, o podias realizarte tú mismo la ensalada para ello podias elegir: tomate, lechuga, maiz, zanahoria, cebolla y aceitunas. Alguna sopa.

De platos: Pasta herbida y a elegir entre dos salsas. Una cazuela de un guiso, dos platos de carne y uno de pescado que variaba según el día y la comida o cena. De acompañamientos habian varios, entre ellos las patatas fritas a destacar. También tenian dependiendo del día a un cocinero que te hacia "al momento o una chuleta de cerdo, mero, .... Lo más aconsejable (eso si no conocia la sal).

Postre: Fruta, más variedad. Mouses que no probe, después de haber probado el flan, la natilla y los distintos tipos de tartas que tenian y decidirme por el helado que no es casero. "¡Igual era lo mejor!".

En definitiva tenian variedad, pero poca calidad, muy poca. Cocina para extranjeros que se comen todo los que les ponen y en cantidad. Con un poco de suerte y elegir bien comias algo normal.

El trato del personal correcto.

¡¡Que más se puede pedir por ese precio!!
¡¡Por el mismo motivo se le debe de pedir mucho más por tener 4 estrellas!!.