Por diversas razones, va a ser difícil de olvidar la cata de vinos que tuvimos

Por diversas razones, va a ser difícil de olvidar la cata de vinos que tuvimos el jueves pasado. Por tantos magníficos vinos que pudimos disfrutar en unas cuantas horas; por los conocimientos, anécdotas, curiosidades, y demás cosas que compartimos sobre el mundo del vino (fue tema casi monográfico de conversación durante cinco horas); y por las personas que nos reunimos entorno a estos vinos, que habiéndonos conocido algunos ese día, terminamos conversando como un grupo de amigos.

Jesús ha recogido de forma muy acertada y bastante precisa todas las notas de cata que se vertieron durante la reunión, por lo que sólo me queda puntualizar sobre algunos aspectos de las mismas.

Por lo que se refiere al “;An”; (Ánima Negra), es verdad que dominaba la nariz un aroma metálico que enmascaraba en parte los aromas vegetales de este vino. Según Horacio, bodeguero de profesión, estos aromas metálicos los presentan algunos vinos que han permanecido durante bastante tiempo en depósitos de acero inoxidable. No sé si esta es la razón o si se trataba de un defecto de la botella, aunque hace un mes probé el An “;99, y no observé este tipo de aromas. En boca sin embargo se mostraba bastante interesante, con un final muy prometedor que augura una buena evolución. Esta opinión también fue compartida por el amigo Marcel. La verdad es que tuvo que competir con tres pesos pesados.

Con el “;Calvario”; y el “;Leda”; surgieron algunas discrepancias. La opinión mayoritaria fue la de situar a este último por encima del riojano. Mi opinión personal es que en este momento Calvario se encuentra mucho más redondo y accesible, y que en una comida puede aportar muchas satisfacciones. Si esperamos un año, posiblemente mi valoración de estos dos vinos se pueda intercambiar, pero eso lo veremos dentro de un año.

“;Clos Mogador”; fue el vino más cerrado en boca de toda la sesión, pero tenía una nariz de ensueño, algo más compleja y perfilada que el resto, y con unas perspectivas de evolución tremendas.

Muy bueno el “;Altre Nos”; de Ferret, con una buena relación calidad-precio, aunque la temperatura de degustación influye bastante. Me pareció que se perdían bastantes sensaciones en boca en cuanto se calentaba un poco en la copa.

Por último, y de camino contesto a José Contreras, durante la cena probamos un vino que el amigo Horacio elabora en su bodega de Jete (Granada). Es un crianza del “;99, en el que intervienen variedades como la cabernet-sauvignon, syrah y merlot, plantadas todas ellas hace unos quince años en unas laderas bastante empinadas, con unos rendimientos bastante controlados, y que están situadas a unos 1.000 metros de altitud (en estas latitudes es muy importante la altura). El vino se cría durante unos diez o doce meses en barricas nuevas de roble americano de tostado medio. Teniendo en cuenta lo que acabábamos de catar, este vino dio muy bien la cara, sobre todo en boca. Según nos comentó Horacio la añada 2002, que tantos problemas ha originado en numerosas regiones, aquí ha sido espectacular.

Todos los vinos se abrieron aproximadamente una hora antes de la cata, no se decantaron (no teníamos suficiente decantadores), y se sirvieron a la vez. Aunque no todos los vinos se habían abierto completamente, ninguno de ellos era una roca inexpugnable, lo que me ratifica que hoy día se elaboran los vinos para que se puedan consumir mucho antes, sin perjuicio de que puedan evolucionar favorablemente.

Bueno, ya dejo de enrollarme, espero que la próxima cata sea tan interesante como esta, un saludo afectuoso,

Francisco Rivas