Si Negre Franc era la perfecta definición del caracter de su autor, Aspriu (que significa salvaje en el sentido de pureza) es la gran expresión de aquello que le ha llevado a lo anterior, a ser quien es. Aspriu es lo que es porque Ramón Parera, el enólogo y copropietario de Celler Pardas, ha nacido donde ha nacido, porque su familia es la que es y, especialmente, porque su padre fue capaz de amar el vino sin dedicarse a ello, tanto que su hijo ha heredado esta pasión, no genética, sino aprendida. Si Negre Franc era su autor, Aspriu es su herencia, sus antepasados, su historia, su padre.

Aspriu es lo que era Franc Negre, pero más, porque contiene todo lo que le ha llevado a serlo. Son las mejores uvas de las mejores viñas en las mejores añadas, criadas en las mejores barricas. "Las mejores uvas para hacer el vino, el mejor vino para hacer Aspriu." No se me ocurre nada mejor para definir este vino afrutado, carnoso y mineral que crece y crece en la boca hasta explotar, y que después se niega a marcharse durante largos, larguísimos segundos, dejando un fondo balsámico que refresca hasta el alma.

Y es que tan pocas botellas necesariamente deben recibir una mayor parte del amor total que se reparte entre todas.