Su color caoba no dice nada que salga de lo normal.
Su nariz, muestra de tonos torrefactos y pasificados va induciendonos a la sobremesa con cafe y chocolates, sus notas terciarias, oxidativas y de vino serio lo hacen prometedor.

En boca sorprende por su buen equilibrio acido y sus recuerdos entre tostados, fruto seco y como no almibarados de buena pasa tocados de raspon.

Largo postgusto sincero y un toque balsamico que invitan a paladear sin prisa pero sin pausa en una sobremesa.

Caoba oscuro con destellos yodados.
En nariz se muestra intenso, complejo y elegante, con cierta complejidad. Nos da las notas que esperamos de un PX viejo con registros de pasas (uvas y ciruelas), higos, dátiles, café en grano, maderas nobles y especias dulces. Con mucha franqueza de aromas.
Y en boca resulta muy equilibrado, con cierta concentración, pero manteniendo frescura y viveza. Poderoso en el paso resulta amable en el final que nos deja un dulzor contenido e integrado y un ligero toque amargoso, casi torrefacto. Ligero y vivo. Muy rico y persistente. Vale como acompañante o como postre en sí mismo.
Un PX viejo jerezano de gran calidad que al igual que sus hermanos de gama es uno de los secretos mejor guardados de Jerez por su excelente RCP, unos 20 euros en botellas de medio litro. Esta gama Sacristía de Romate resulta tremendamente interesante.

Color caoba oscuro con ribete anaranjado.
El aroma es muy elegante, complejo y sugerente; huele a ciruelas pasas, higos secos, dátiles, café con leche, miel, crema catalana, peras en almíbar, tabaco de pipa...
En boca es aún mejor. Tiene un equilibrio magnífico, ya que une un dulzor nada empalagoso (incluso a 16 grados) a un paso completamente envolvente y una exquisita acidez que de la frescura. El final es larguísimo.
Cuesta 19 euros la botella de 1/2 litro.

Color caoba muy oscuro. De entrada, fuertes aromas a acetona (??) que requieren su tiempo para desaparecer. Hay dominio de las ciruelas pasas, pozos de café, madera vieja seca.
La boca es de lujo, de excelente textura oleosa, envidiable equilibrio, sabroso, lleno, muy goloso, chocolate, café, higos, dátiles, toda la gama pero con gran finura, con atisbos balsámicos en retro, y un largo postgusto. Es, por sí mismo, un gran postre.