Vino color oro quemado oscuro, capa media, limpio aunque con poso final en botella, lagrima abundante.

En nariz con buena intensidad, notas de frutos secos, cacao, bollería y tostados, puntas de cítricos y barniz, contundente, perfumado y muy expresivo.

El paso por boca, potente, afilado, seco, amplio, con volumen, buena acidez, equilibrado, tostados con cítricos y final salino.

Retronasal, tostados.

Postgusto, largo y muy bueno.

Otra botella de este viejo amontillado que no deja indiferente a nadie. Un punto por debajo de la catada anteriormente pero tremendamente disfrutable.

Vino color caoba con destellos dorados, limpio, brillante y lágrima abundante.  ( Algo de poso al final de la botella)

En nariz con buena intensidad, notas de bizcocho en licor, barniz, lacas, miel, fruta blanca pasificada con fondo tostado, frutos secos, perfumado y muy expresivo.

El paso por boca, seco, afilado, punzante, con volumen, largo recorrido, buena acidez, equilibrado, amplio, mismos aromas que en nariz, destacan frutos secos, muy disfrutable y gran complejidad.

Retronasal, tostados.

Postgusto, largo y muy bueno.

Disfrutado en la Comida de Bojos Pel Vi celebrada en el Restaurante El Laurel el 07/01/2017.

Visual: ámbar oro viejo, bastante limpio y brillante.

Nariz: de muy buena intensidad, barnices, flores marchitas, aldehídos, orejones, frutos secos, balsámicos, salinidad. Bastante potente y complejo en nariz.

Boca: ataque voluminoso pero punzante, avellanas tostadas, salino a tope, potente pero ágil en el paso por boca, de buena estructura, media densidad y buen cuerpo. De magnífico y largo final con notas salinas y a frutos secos en retrogusto y barnices en vía retronasal. Estupenda boca.

No tan sorprendente como otras botellas de Amontillado El Duque Viejo disfrutadas en otras quedadas del grupo, pero en su línea de alto nivel.

Vinazo que no falla.