Restaurante situado frente a la playa de la Arena con estupendo parking público y gratuito justo en frente. ¡Ojo! los días de buen tiempo se queda pequeño aunque en días como el de hoy, lluvioso a más no poder, estacionamos frente al local.
Pese a estar ubicado en los bajos de un edificio un poco deteriorado por las inclemencias del mar cantábrico, el restaurante en sí muestra muy buena cara. Posee grandes cristaleras que le dan claridad al interior y nada más acceder, uno se encuentra una gran estantería con una estupenda colección de botellas de vino de todas las denominaciones. Echando un vistazo rápido puedo ver Pingus, Pago de los Capellanes, Protos, Remelluri…además de numerosas botellas que no había visto nunca, vamos que hay de sobra para elegir.
Con la de hoy, he estado en dos ocasiones en este restaurante. Aprovecharé este comentario para detallar mis dos experiencias, la primera, de menú del día y la de hoy a la carta.
El pasado mes de junio, estuve por primera vez animado por las buenas críticas que se habían colgado. Aquel día probé el menú del día para tantear su cocina, tenían 4 primeros y 4 segundos a elegir, todos con muy buena pinta.
Lo degustado fue lo siguiente:
1-“Caldereta de pulpo y marisco”. Mucho sabor, con unos buenos trozos de pulpo. Me gustó mucho.
2-“Entrecot”. Me presentaron unas lonchas de entrecot, no muy abundante, pero de calidad extraordinaria. Carne tierna y con sabor. Intuí que ponían poca cantidad al ser menú del día, pero la carne era la misma que ofrecían cuando se pedía carta, así que me prometí en aquella ocasión que volvería a probar la carne de la carta.
3-Postre: Tarta de manzana. Rica sin más.
Acompañó la comida un vino crianza que no recuerdo cuál fue, pero estaba bastante rico.
El menú del día, con vino y café, salió por 16,5 € Iva incluido.
Este mediodía he vuelto por segunda ocasión a cumplir mi promesa de probar la carne. Me lo ponen difícil, porque fuera de carta nos ofrecen pescados del día (salvajes): rape, rodaballo y lubina, incluso nos los traen en una bandeja para que los veamos. Estupenda presencia y olor aún sin cocinar. Pero como tenía entre ceja y ceja el chuletón, mis acompañantes cedieron a mis pretensiones.
Comida para 3 personas, todo para compartir:
1-“Chipirones encebollados”: 6 chipirones pasados por la plancha, con cebolla pochada de acompañamiento. Presentado en una cazuela de hierro. Estupendo punto de los chipis. Nos gustaron mucho. 17,6 € Iva incluido. (Ver foto).
2-“Salteado de Boletus con yema de huevo”: Estupenda ración de boletus con una yema de huevo en semicruda en el centro. Exquisito el sabor y la textura. 19,8 € Iva incluido. (Ver foto).
3-“ PE-DA-ZO chuletón” 1,4 kg, sin apenas hueso y poca grasa, la justa. Así que la proporción de carne era sobresaliente. Se acompaña de patatas fritas y pimientos rojos. La carne era pura mantequilla, con sabor, churruscada por fuera y prácticamente cruda por dentro, por lo que te colocan en el centro de la mesa una plancha de hierro caliente y te la haces al gusto. Comimos carne hasta hartarnos y yo personalmente disfruté como un niño. Eso sí, ¡vaya humareda que montamos en el comedor! 36,3 €/kilo por lo que salió a 46,2 € el chuletón. (Ver foto).
Apenas quedaba hueco para el postre, así que decidimos compartir uno para los tres. No había carta como tal, sino que nos los cantaron: flan, natillas, pastel de chocolate…Nos decantamos por éste último. Se trata de una especie de bizcocho cubierto por chocolate, acompañado por piñones y dos penachos de nata. Estaba bueno aunque para mi gusto un poco seco el bizcocho. 5,5 € Iva incluido.
En cuanto al vino, me hubiera gustado elegir algo diferente, pero uno de mis compañeros de mesa quería probar Viña Alberdi y nos decantamos por una botella de crianza del 2007. En su justa temperatura, muy rico y servido en buenas copas de cristal fino. 15,4 € Iva incluido.
También bebimos una botella de agua. 2,75 € Iva incluido. Copas de cristal grueso.
El pan que acompañó la comida, típicos bollitos de chapata artesana, llegan a la mesa calientes y crujientes. Muy ricos. Repetimos y me gustó mucho el detalle de que no cobraran el pan.
Café solo, cortado e infusión. Todo correcto.
La cuentas ascendió a 111,87 € Iva incluido. Invitación a los cafés, detalle que yo personalmente valoro mucho, aunque luego los pague de extranjis con la propina.
En las dos ocasiones que hemos estado, lleno absoluto. Pese a ello, servicio de mesa muy agradable, atendieron con corrección y no faltó nada en la mesa.
Una crítica constructiva: Cuando llegas al local, te preguntan si vas a comer de menú o a la carta. Las mesas son todas iguales, pero si eliges menú, te ubican en las mesas que están vestidas con mantel de papel. Si por el contrario eliges carta, te ubican en las mesas que están vestidas con mantel de tela. Yo personalmente no haría esa diferenciación en función de lo que se vaya a comer, sino que vestiría todas las mesas por igual, con mantel de tela. Creo que sería más elegante y daría una mejor presencia al comedor…es mi humilde opinión.
Vista la grata experiencia vivida con la carne, volveré una tercera ocasión a probar sus pescados.
P.D.: La valoración la he hecho sobre la segunda experiencia, que he comido a la carta.