Tal vez el mejor restaurante japonés de Valencia.

Hace poco hice una especie de recopilatorio de los mejores restaurantes asiáticos en Valencia, haciendo especial hincapié en aquellos con el mejor sushi de la ciudad. Sin lugar a dudas en ese post falta este, donde comí posiblemente el mejor sushi de Valencia.

Ubicado en el Mercado de Colón, junto a Manglanoparatomar, lo tenía localizado y marcado en la lista desde hacía tiempo, sobre todo porque además tenía muy buenas referencias de sus ostras, uno de mis pequeños vicios.

El sótano del Mercado de Colón no es el mejor escenario. Tampoco lo mejora las estrechas mesas con manteles de papel y un espacio desangelado que no está ni dentro de un mercado ni en un restaurante al uso. Poca cosa se va a poder hacer en este sentido, pues el espacio es el que es.

Carta extensa basada en el pescado fresco de la cercana pescadería Martín y Mary, con elaboraciones clásicas japonesas y algunas licencias occidentales que no desentonan con las primeras. Pedimos todo lo que nos apeteció, sin restricciones y obviando los menús que nos ofrecían, pues había bastantes cosas que queríamos probar y quedaban fuera de la oferta de dichos menús.

La noche del sábado uno de los cocineros se encontraba dando unos cursos de cocina japonesa, por lo que los pillamos algo escasos de personal. El único cocinero que quedaba sudó esa noche su jornal. En vista de que la cena se iba a demorar más de lo previsto nos invitaron a unos edamame, las típicas vainas japonesas con soja y especias. Un aperitivo altamente adictivo. El resto de la cena fue saliendo sin retraso y la verdad es que hacía tiempo que no disfrutaba tanto. Hosomaki de salmón y atún que ya te preparan por su alta calidad, tanto por el arroz como por el pescado. El nivel empieza a subir con el uramaki de atún picante, y eso que los makis ya empiezan a cansarme, sobre todo cuando se abusa de la cantidad de arroz.
De sashimi probamos el de atún, el sashimi de salmón y un exquisito sashimi de vieira. Todo en grandes porciones, perfectas de textura y sabor. El sabor es tan rico que a penas usas un poco de soja y wasabi.

Probamos el tartar de salmón con aguacate y mostaza y el tartar de atún. El de atún puro sabor del pescado con una salsa de soja muy suave, y el de salmón muy rico, con su punto perfecto de aguacate y mostaza.

El tataki de salmón es todo un espectáculo, sellado por fuera con soplete, lo que da un toque dulce al caramelizar la soja y un cambio de textura muy rico. Las pequeñas huevas aportan un punto más de marino y ese toque crujiente.

Los nigiri son un verdadero espectáculo, con la perfecta proporción de arroz y pescado, esto es, poco arroz para acompañar el buen pescado.
No dejé pasar la oportunidad de comer una ostra, buena calidad y buen calibre.
Probamos unos postres, de nuevo un detalle del cocinero por el tiempo de espera, aunque con el homenaje que nos acabábamos de dar ya ni nos acordábamos. Brownie y blondie, un clásico brownie de chocolate y uno de calabaza, muy buenos ambos.

La carta de vinos es sencilla pero tiene cosas interesantes. El apartado de espumosos, la opción más interesante para este tipo de comida, es algo escaso, aunque no dejamos pasar la oportunidad de probar un cava de Castellón, Babel de Vinya Natura, que estuvo a la altura.

Lo dicho, que lo apunto en la lista de los mejores japoneses de Valencia. Pedimos sin miramientos, con dos botella de cava para cuatro y pagamos 35€, lo que me parece una RCP excelente.

Creo que mejor atún y más fresco no había comido en la ciudad.
El temaki de anguila de la albufera fue excelente.
Fuimos a tomar unas ostras y un cava y al final nos quedamos a comer.

Hay varias cosas que me gustaron cuando cene en Momiji, sobre todo que esta en el mercado de colon y para mi es un lugar precioso, el trato tambien bueno y la comida me gusto mucho, pedimos lo siguiente:
Tataki de atun
Wok de calamar
Nigiri de salmon
Gunkan de Ikura
California
Atun picante
Botella de optimus

Había oido hablar mucho de este sitio así que hoy me he decidido a probarlo.
Situado en el semisotano del Mercado de Colón la ubicación es excelente y el local acogedor.
Hemos comido:
-Edamame
-Ceviche de bogavante
-Chaman mushi
-Tar-tar de atún y manzana verde
-Temaki de anguila de la albufera
- 1 botella de agua y 2 copas de Cremant de Loire Rose Brut Chanceny
Todo esto por 59 euros.
El servicio excelente, un trato amable y la oportunidad de adaptar los platos en la medida de lo posible a mis alergias alimentarias, lo cual es de agradecer porque no es algo habitual.
Sin duda repetiré.