Nunca defrauda

Somos de Gijón y ya habíamos acudido otras veces a El Cencerro a comer o cenar, ya que vivimos cerca, y sobre todo porque es uno de nuestros sitios preferidos en la ciudad. Sin embargo, la semana pasada fue la mejor de todas las visitas que le hemos hecho a Damián y Viviana.
Como siempre, nos sentamos en la parte de atrás del local, en una mesa coqueta, íntima y reservada, perfecta para disfrutar de la velada con la persona elegida para la velada. Nada más llegar, se nos ofreció bebida, para ir empezando a abrir boca; tomamos una caña y un rueda Prado Rey verdejo 2012. Pocos minutos despúes, llegó el pan, con sus cuatro variedades a elegir entre maíz con pipas, blanco, con aceitunas negras o integral. Tras esto, comenzamos con un delicioso aperitivo de espuma de patata con fritura de almendra morcona y crujiente de patata violeta, realmente suave y perfecto en su contraste con la almendra.
El primer plato fue Steak Tartar, inigualable; venía acompañado por helado de mostaza, brotes de cebolleta y 5 tipos distintos de mostaza de Dijon, así como unas pequeñas tostaditas para unirlo todo. Realmente exquisito.
Para continuar, yo pedí el Rabo de Toro deshuesado con puré de patata trufada, que resultó realmente sorprendente, ya que su fina presentación (el puré llega en un botecillo de cierre hermético, que cuando se abre desprende un olor delicioso a trufa) y los aromas lo hacen realmente sabroso. Mi acompañante comió una ración de Kobe (o Buey Wagnyu), que salió acompañada de una fuente pequeña de patatas fritas y en el punto correcto, pudiendo ser más cocinada en el plato caliente sobre el que llega.
Como todavía teníamos ganas de más, pedimos el Souflé de Avellana con jengibre en diferentes texturas (helado, confitado y crujiente), decorado con pétalos de rosa confitados. Un postre realmente especial que, aunque no es del gusto de todo el mundo, hace que el paladar experimente nuevas sensaciones y su dulzor y contrastes están muy bien conseguidos.
Todo esto lo acompañamos con una botella de Alonso del Yerro 2009 (tempranillo)
Cerramos la cena con dos cafés y dos Gin Tonic, uno de ellos Tanqueray Ten con Fever Tree y el otro Bulldog con Fentiman.
La cuenta ascendió a 157,4€
Caña: 2,20
Rueda: 2,20
Pan(2): 4
Steak Tartar: 24
Rabo de Toro: 24
Kobe: 51
Postre: 7
Vino: 24
Café: 3
Gin tonics: 16

Sin duda alguna es un lugar incomparable, al que volveremos más veces a disfrutar de la atención, el cuidado en los detalles y la calidad de la cocina y el servicio del lugar. Un 10 sobre 10.

  1. #1

    Jeronimo

    Pues hombre ya puestos…… sería de agradecer que si además visitas otros restaurantes nos lo cuentes.
    Eso diluiría la sospecha que algún malpensado pudiera albergar, de que este comentario no es otra cosa que la contrarréplica al comentario anterior.

  2. #2

    Missogilvy

    Hombre, teniendo en cuenta que soy nueva en este foro, y que por simple curiosidad he buscado mis sitios preferidos, puedo decir sin miedo a malos pensamientos que más que una contrarréplica, es una proyección de una opinión distinta a la del comentario anterior, no teniendo nada que ver con ella, pero con la intención de demostrar que un lugar no es malo o bueno porque una o dos opiniones así lo dictaminen, si no que debe haber variedad de las mismas para que el usuario que las lee dictamine si prefiere ir o no.
    Respecto a lo de los otros restaurantes, tranquilo, iré dando mi opinión sobre otros sitios que he visitado, tiempo al tiempo.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar