Para nosotros es un clásico. Da igual que sea en verano o en invierno, cuando sale buen día, pues su ubicación a pie de playa hace que resulte muy agradable comer en su terraza disfrutando de la brisa marina.
El aspecto de la pequeña sala y del local en general no engaña… un bar corriente y moliente, de los de toda la vida. Su verdadero encanto reside en su terraza cuya extensión a modo de tarima sobre la misma playa me traslada a los antiguos merenderos de mi infancia. Mobiliario y menaje de batalla acorde al entorno descrito, manteles y servilletas de papel… pero buenas sombras y corrientes de aire, que es lo que importa en este caso, además de las inmejorables vistas al característico azul turquesa de las aguas de esta playa.
A reventar de gente en Agosto. Decibelios por doquier. De hecho, es la primera vez que nos ubicaron en el interior de la sala y que en esta ocasión sesga la puntuación aplicada al entorno.
Entre cuatro personas compartimos todo al centro:
Ensalada de Pulpo. Es innegociable, no puedo evitar pedirla. Descrita a la perfección por Hambrebuena en el comentario previo. Su textura y escabechado es destacable. Fijo.
Patatas Bravas. Bien manejadas, de las que quedan con el interior blando y una costra gruesa y crujiente. Correcto el all i oli. Control.
Frivolidades. No es otra cosa que tres preparaciones de fritura, concretamente un pincho con dos colas de gamba al ajillo, una cola de langostino rebozado y un cono crujiente relleno con una pasta de sabor también a crustáceo. Buena fritanga.
Boquerón frito. Tiernos y sin rastro de aceite en su exterior. Se comen como si fueran pipas. Pasatiempo.
Sardinas. Media docenita solo, pues es un producto que no gusta a todo el mundo. A mí me pasaba lo mismo de pequeño pero ahora… cómo cambian las cosas!! Evolución.
Clòtxines. El mejillón de la zona. Sin misterios, bien resueltas y otro de mis vicios confesables. Pecador.
No tomé postre pero se sirvieron algunos en mesa, un flan, tiramisú… no lo recuerdo bien.
Para beber cayeron varias jarras de cerveza y agua. Un café normal para terminar.
Seguiremos yendo. Maravilloso entorno y honesta oferta de producto sencillo bien manejado a muy buen precio. Por encargo también preparan arroces y platos tradicionales de Marruecos. Resulta un disfrute en toda regla comer un rico cuscús en esa terraza los días en que el sol asoma en invierno. En resumen, de lo más estable de la zona en este segmento.
Patatas Bravas
Sardinas
Ensalada de Pulpo
Esos bares por el mundo con un encanto especial como esa terraza que nos volvemos locos buscandolo en los grandes locales y lo tenemos a mano sin saberlo.
Saludos
Tienes razón. A veces nos ofuscamos y no nos damos cuenta de lo que tenemos al lado, los de toda la vida.
Un saludo!
Es que ya sabes que el hombre propone...
Pues si un día os apetece comer en plan de picoteo clasicorro o cocina marroquí probad a ver qué tal. Ojo si encargáis cuscús o similar pues las raciones son generosas.
Un gusto saber de ti por estos lares.
Un abrazo!
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.