Habia ido hace mucho tiempo al anterior local de donde sali con una buenisima impresion por lo que sinceramente mis expectativas eran altas teniendo en cuenta las buenisimas criticas y los llenos totales que tiene el nuevo restaurante.
Comida para 3 previa reserva de dias antes para un dia laborable al mediodia. Lleno total, con barra y terraza ocupadas y dando "no" a clientes que se acercaban por si habia sitio en algun momento. Gran cantidad de personas en el servicio. Muy profesionales.
Primero un aperitivo de la casa muy insulso consistente en un pate simplon sobre un biscotte.
Decidimos compartir medias raciones que fueron:
* Croquetas de aji de pintada. Dos por comensal. No me dijeron nada. Textura suave pero sin llegar a ser excepcional y rebozado normalito. El aji viene aparte y no aporta nada a la croqueta.
* Tomate aliñado con fresas. Un tomate de buena calidad . sin mas
* Mejillones de roca con salsa de curry rojo y tomate picante. Muy buen producto. Desmesurada media racion que parte quedó sin tocar. La salsa mas bien tomate picante que otra cosa. Al vapor simplemente habrian estado mejor
* Pulpo asado con salpicon de boniato. Aqui nos sugirieron racion completa ya que es una pata. La pata era cemento armado imposible de cortar ni masticar . Debiamos haberlo dicho. El acompañamiento mas bien me parecio una vinagreta con muchisimo pimiento. Olvidable
* Presa de iberico con mole picante. DE nuevo la presa incomible . Durisima. El mole bastante espeso y muy muy pesado. Muy mal
La carta de vinos me parecio muy bien pero dado que habia que trabajar pedimos vino por copas. en mi caso un syrah de Marruecos llamado Tandem que me gusto.
No sé a cuanto ascendio la cuenta pero estimo que unos 30 o 35 euros por persona.
En resumen, total decepcion donde salvo el tomate no se salvó ningun plato. Quiza no acertamos en lo pedido pero desde luego el pulpo y la presa estaban durisimos al margen de las elaboraciones que puedan gustar o no.