Lastima que la calidad de la cocina no corresponda con el entorno que la alberga. Si se puede hacer abstracción...
Un fuerte abrazo
Los comentarios que me preceden son de hace 11 años, pero siguen vigentes, el local pasa totalmente desapercibido si pasas por delante, solo se ve la barra y la plancha donde se cocinan muchos de sus platos, el comedor es una sala con las mesas más que pegadas, mesas de formica de los años sesenta, uno de los comentarios lo tilda de "canalla", un local que si no es por el boca oreja jamás entrarias, está frente por frente de una de las puertas laterales del mercado de Santa Caterina.
Los servicios están en el sótano al que se accede por una angosta y tortuosa escalera.
Las paredes revestidas de cerámica hasta media altura, los vinos plasmados en una pizarra en el fondo del comedor, la carta una hoja escrita a mano con los platos del dia.
Ese dia casualmente habia poca clientela, me comentaron de es difícil conseguir mesa para el mismo dia.
Los primeros compartidos
- Unas anchoas preparadas al momento por Rufo, sin ni una sola espina, muy buenas y carnosas-
- Navajas a la plancha de buen tamaño, quizá para mi gusto un pelín pasadas de cocción.
- Huevos rotos con patatas y jamón ibérico, que buen jamón.....
Los segundos los dos coincidimos en pedir el pescado del dia que era
- Lenguado a la plancha de buen tamaño, cocción perfecta, carne tersa, fresco fresquísimo.
Buen pan con tomate.
La comida la acompañamos con un Albariño de la D.O. Rias Baixas elaborado por Fento Wines en Ribadubia, Pontevedra. El servicio consistió en descorche y primer servicio.
Un caña de cerveza.
No tomamos postre.
Dos buenos cafés y un chupito de whisky de malta.
En la mesa de al lado sirvieron unos carabineros pelaron la cola y los hicieron a la llama con soplete, que pinta....!!!
Precio acorde a la calidad del producto, imprescindible reservar.
La puntuación media es un aprobado justito por los condicionantes del entorno, si sólo se puntuara la comida y el precio la nota seria un sobresaliente.
Anchoas
Navajas
Huevos rotos
Lenguado
Albariño
Lastima que la calidad de la cocina no corresponda con el entorno que la alberga. Si se puede hacer abstracción...
Un fuerte abrazo
Pues lo que hay que hacer es no levantar la vista del plato y disfrutar de la comida y de la compañia.
Un fuerte abrazo
Me parece una buena idea,:-)
Un fuerte abrazo
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