Tenía uno hoy antojo de unas rabas (calamares), de los de jibión, de los ricos.
Pensando un poco hemos decidido ir a la Abadía, teníamos recuerdos de años anteriores de ser un buen sitio.
La verdad es que nos han sacado una ración generosa y estaban ricos, con el punto exacto de rebozado, más bien poco que mucho.
Luego hemos pedido una mariscada para 2 que tenían por 53 euros con vino rueda incluído.
El vino un Antojo 2011 que se ha dejado beber, nada del otro mundo precisamente pero no estaba malo.
Una langosta partida por la mitad. Un tanto más bien seca, pequeña, de sabor muy rica pero sin más
2 nécoras, estaban correctas.
6 gambas plancha, un para de minutos más en la plancha y hubiesen estado de rechupete, seguro.
media docena de almejas, también secas, no parecían recién sacadas el mar precisamente.
Unos 8 gordos langostinos, lo mejor de todo, ricos, con el punto exacto de sal.
Un par de cigalitas, como la langosta, pequeñas y un tanto secas.
Nos hemos quedado con hambre así que hemos pedido una tabla de quesos cántabros.
No me apetecía preguntar qué quesos eran pero no estaban nada malos, la verdad. Con una especie de miel pero de manzana, muy rica, mucho, "maridaba" de cine con los quesos.
El pan de chapata, un poco ya como de ayer, no acabo yo de encontrar pan rico en estos lares.
Hemos comido estupendamente a la carta en este restaurante en unas 3 ocasiones ya así que prefiero pagar un poco más y salir más contento.