Lugar bonito y buena comida.

Recogiendo una de las sugerencia que me hizo Bilbis en un comentario (y puesto que Mina se me iba un poco de presupuesto a estas alturas del viaje, lo dejo en pendientes) decidimos visitar Bascook. El restaurante se situa en un antiguo almacen de sales, y la verdad es que el espacio ha quedado realmente bonito. Un interiorismo contemporaneo y urbano que mantiene el recuerdo y el respeto hacia el pasado del local.
Teniamos reserva para las 14:30, pero Bilbao era la segunda de las paradas del viaje estival, y el traslado desde Zarautz, la localización del hotel, descarga de equipaje.... hizo que nos demoraramos un poco, llamé al restaurante para avisar del retraso y ningún problema, atención amable. A la llegada al local el propio Aitor Elizegi, que se encontraba en la zona de recepción, nos acompañó a la mesa.
La carta se presenta en las páginas centrales del periódico Bascook Magazine, original propuesta periodístico-culinaria.Los diferentes platos se dividen en tres bloques: cocina verde, slow food Km 4 (productos del terreno) y traveling mundutik (cocina de maleta con influencia internacional).

De lunes a viernes existe un menú del dia (20 + IVA) compuesto por primero y segundo a elegir entre los platos de la carta señalados con asterisco más postre. Nosotros elegimos los siguientes cuatro platos:
Nigiris de guacamole con muesli de maiz y pipeta de jalapeños.(cocina verde) Fantático.
Huevos rotos,muesli de hongos y ratauille de sihitakes.(cocina verde) Bueno.
Carpaccio de buey + hummus+ crispy salad + pipeta de parmesano (traveling mundutik). Muy bueno, la carne deliciosa, junto a los nigiris el plato que más me gustó.
Bacalao con kokotxas, pil-pil de coliflor y chips de alcachofas (cocina verde). Bueno, pescado en su punto.
Las raciones son cumplidas. Me pareció muy gracioso la presentación de las salsas en pipetas, además de estético te permite ponerte la cantidad justa de salsa según gustos.
Nuestra idea era compartir todos los platos y nos los sirvieron al centro para facilitar su degustación, de hecho al coincidir los dos primeros en la mesa se acercó Aitor Elizegi a disculparse por el descuido (si bien a nosotros tampoco nos importó demasiado es sin duda un muy buen detalle de exigencia del local de cara al cliente). Los dos segundos salieron perfectos, incluso el bacalao lo dividieron en dos medias raciones para mayor comodidad. Atención y detalle más que bueno.
Para beber pedimos el riesling White Guerrilla (15+IVA), bien pero tuve la sensación que fue de más a menos durante la comida.
Café para acabar. (2+IVA)

Postres
helado de pastel vasco.
postre com mumm rose y frutos rojos (no recuerdo bien su composición pero si que estaba buenísimo). Buenos postres.

Lugar bonito e interesante, con una comida realmente buena elaborada en propuestas muy creativas, y con un precio entre semana, con el menú del dia, bastante ajustado. Me lo apunto como referencia para próximas visitas a Bilbao (que seguro que las habrá, nos encanta la ciudad y nos es imposible no volver).

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar