Primera visita atraidos por la estrella Michelín y por la fama que le

Primera visita atraidos por la estrella Michelín y por la fama que le arrastra en Barcelona. Comimos 4 personas de carta. Primera impresión buena, menos minimalista de lo esperado y correcta atención. Carta sin grandes sorpresas de la que cuesta elegir algo novedoso, sobre todo de los primeros platos. Al pedir primera decepsción, de los 8 platos elegidos entre los 4, tres no tenían y uno no se recomendaba. Para una carta impresa en papel creo que no costaría nada renovarla con la existencias. Carta de vinos y destilados muy abundante y originalmente distribuida. Precios muy altos sobre todo para los vinos mas baratos. No soy mu y amigo de la decantación por la decantación pero en la primera copa que me sirvieron ya tenia 1 cm de posos. Se hecha en falta un sumilier profesional. Materias primas excelentes: guisantes con sepia inmejorables y lechazo con espuma de queso en su punto. Postre muy originales pero un poco insipidos. Me quede con ganas del Tokai de la carta pues tampoco tenían. En fin, pasaran unos añitos para que vuelvan. Me parece exagerada la estrella comparada con otros mucho de Barcelona que no la tienen y con los que si la tienen. Precio: 65 pp con vino.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar