Gastrobar único

Con respecto al comentario realizado por el anterior usuario, y respetando las opiniones de todos los miembros de la comunidad, no sé si estamos hablando del mismo restaurante.

En mi caso era la segunda vez que repetía, y aunque la primera la podríamos considerar como una experiencia bastante positiva, en esta segunda se han superado con creces, entiendo que en mi primera visita todavía les faltaba algo de rodaje debido a su reciente inauguración.

Después de observar la carta, Eduard nos pidió si nos fiábamos de él a la hora de hacer una pequeña selección de platos. Para empezar disfrutamos de un foie con una capa caramelizada, si digo la verdad, hacía tiempo que no disfrutaba con un foie así. Posteriormente seguimos con unas excelentes navajas, de reducido tamaño, que si te pones a pensarlo, son mucho más cómodas de digerir que las clásicas, las sirvieron en su justa temperatura. El steak tartar, que ya saboree en mi primera ocasión, continuaba en un nivel más que excelente. Las patatas “3” que ya se podían degustar en su variación en el Arola del hotel Arts, continúan impresionantes. Seguimos el almuerzo degustando los langostinos rebozados al curry –sublimes-. Para finalizar, y continuando con la originalidad del concepto de las coca-pizzas, pudimos degustar la que llevaba de ingredientes butifarra negra y blanca, hígado de pato y una capa de jamón ibérico. Sorprendente, es todo lo que puedo decir.

Otro aspecto a valorar, y dentro del cuidado de los pequeños detalles, son los panes con los que se acompañan parte de los platos. Entiendo que Eduard es bastante exigente en este aspecto y así se demuestra en la calidad de cada uno de ellos, tanto el pan cristal con tomate, así como el que sirvió para acompañar el foie, en ambos casos, da muestra de diferenciación.

La comida la acompañamos con dos botellas de L’Equilibrista, 2007, de DO Cataluña y multivariedad Syrah, Cariñena y Garnacha. Excelente, ya lo conocía. De potencia en boca inicial, después va ganando y fue idóneo para acompañar perfectamente los diferentes platos.

Podríamos decir que estamos hablando de un gastrobar con una excelente materia prima, que cuida los pequeños detalles y donde Eduard Arola y su equipo te hacen disfrutar en un espacio creativo, con diseño y con buena música, pero sobretodo, de una cocina de experiencias y sensaciones.
Indudablemente repetiré en sucesivas veces.

  1. #2

    Francescf

    El anterior usuario es dueño de un restaurante y fue cocinero con estrella Michelín. ¿Y Vd.? Después de 6 meses de su único comentario, me da que esto es puro spam... :-(

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar