Hemos estado tres días en Salamanca. Elegimos tres restaurantes para comer: Chez Victor, Victor Gutierrez y EL Candil. En este último el esfuerzo por cuidar el vino es notable. La comida no tanto. Unos esparragos sin gracia, setas de temporada churrascadas, la ternera morucha en sus dos preparaciones: entrecot y guisada con castañas, correcta y unos postres industriales infames. Los vinos: Oloroso gobernador, rosado de cigales, Abadía Retuerta Selección, Oporto Vale da Mina, Noé. El apiñamiento de la mesas no permite expansiones de ningún tipo. Lo siento Mario.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.