No se trata de un restaurante al uso, si no de una especie de bar,meson, bodega todo en uno. De los pocos sitios de la ciudad en el que degustar algun que otro vino decente por copas.
Decoracion mas bien rustica, barricas y soleras, mesas antiguas de coser y otras de madera alargadas e incluso algun sofa, cajas y botellas de vino repartidas por todo el local, todo sin ningun orden aparente. Tambien disponen de un reservado para reuniones mas intimas.
Dia entre semana, 20:00h y lleno hasta la bandera, con un poco de suerte conseguimos sentarnos en una de las mesas alargadas, siempre que no te importe compartirla.
Carta bastante basica centrada en quesos, embutidos, conservas y alguna que otra tosta, eso si, de muy buena calidad.
Nos decidimos por un surtido de quesos con ibericos 15€, abundante y variada racion, hacer mencion al jamon cortado a cuchillo y unas tostas variadas 2,95€ c/u, de tomate con jamon iberico, jamon iberico con queso brie, queso picon con nueces,queso de cabra con cebolla melada y foie con manzana caramelizada, todas muy buenas y de gran tamaño.
En el apartado de vinos no existe carta, simplemente te acercas a la bodega y eliges la botella que te apetezca, de un gran surtido y a precios bastante ajustados, esta vez elegimos dos, Dominio del Bendito El Primer Paso 09 y Refugallo 07, no recuerdo el precio exacto, servicio que se limita al descorche y poco mas.
Terminamos con un brownie de chocolate con helado de vainilla 5€, muy bueno y unas copas de Don PX invitacion de la casa.
Charle brevemente con el dueño y sin duda es un apasionado del mundo del vino.