Esta vez nos decidimos por una cena ligera en este local próximo a la calle Elvira. Taberna popular llena de ambiente casi a cualquier hora. Nosotros fuimos un sábado noche y nos costó alcanzar la barra. Pero merece la pena esperar un poco y disfrutar de su oferta de raciones, chacinas ibéricas y montaditos.

Tomamos entre los tres:

- Ración de habas con jamón: Ración más que generosa de habitas tiernas con jamón picadito. Sabrosas y con el aceite justo para no hacerse pesadas.

- 2 montaditos de lomo, jamón y pimientos verdes: Sencillos pero muy gustosos.

- 2 montaditos de bacon y Roquefort: También sencillita preparación pero agradecidos de comer.

- Ración de rabo de toro: Ración con tres buenos trozos de rabo en salsa. La carne salía melosita y sin problemas del hueso. Un placer este clásico andaluz.

Disponen de carta de vinos en torno a La Rioja y Ribera del Duero visibles tras una vinoteca climatizada. También, como se ha comentado más abajo, hay oferta de vinos anadaluces y vermouth, aunque nosotros tiramos por las cervecitas. No puntúo entonces el servicio del vino. Tomamos dos cañas y dos refrescos que sirvieron con las correspondientes tapas de rigor. Quizás no tuvimos suerte esa noche, pero no nos gustaron ni la primera ni la segunda (unas cuñitas de tortilla de patata bastante seca y unas patatas alioli que dejaban bastante que desear).

Precio total: 43.10€ (inc. IVA, servicio del pan, dos cañas a 1.80€ y dos refrescos a 2€).

Nota: El precio que indico por persona sería compartiendo 3 raciones entre 3 personas y sin bebidas.

Más tapeo, más alegría y más Andalucía. Recomendados por un taxista muy majete, nos acercamos a tomar un palo cortado a esta magnífica bodega. Viendo el jaleo y las tapitas, nos atrevemos con el asedio de la barra; una vez hecha la posición, empieza el espectáculo:

- Migas granainas: sueltitas y guarnicionadas con picadillo, carne asada y refrescantes pedazos de melón. Acertada recomendación.
- Papas alpujarreñas: patatas fritas con chacinas, pimientos... un clásico bien solventado.
- Bacalao con tomate: tajadas desaladas guisadas con una suave salsa de tomate. Excelente.
- Patatas bravas: sorprendentemente buenas, salsa base apimentonada y con el picoso justo. Muy bien.
- Carrillera guisada: con guarnición de verduritas y muy bien guisada. Excelente.

Acompañado todo ello de vermouth casero (excelente), palo cortado a granel (muy, muy bueno) y cervecitas mal tiradas, salimos por 15 euros por barba. De lo mejor de granada para tapear sin duda.

Castañeda

En el hotel donde nos alojamos nos recomendaron este local de tapas por ser "menos turístico" y tener una buena calidad. Es cierto que se ven menos extranjeros pero desde luego es un local muy concurrido en el que cuesta llegar a la barra. Eso sí, cuando dispones de un hueco es un espectáculo ver trabajar a esos camareros que llevan cuentas imposibles de cabeza, que atienden a toda esa masa de hambrientos clientes que no dejan de pedir cervezas, platos, vinos, cuentas...

Ambiente típico de estas bodegas, con los barriles de vino, licores y espirituosos, pero esta vez llenos de verdad, no sólo de decoración. Allí se encontraba uno de los mejores vermuts que pude tomar en Granada y del que disfruté de lo linde. Las tapas bastantes buenas, a excepción de la primera que probamos, un arroz que no pudimos comer y que casi nos hizo abandonar el local... Pero rápidamente se resarcieron con algo de pescadito frito, un montadito de requeté (melva y pimiento rojo) y, para finalizar, una ración de rabo de toro que además de ser copiosa estaba muy bueno.

Los vinos se piden por D.O. Es curioso cómo la gente aún pide un Ribera o un Rioja, o un Rueda. De fino Tio Pepe, mi segunda opción tras más de un vermut (ahí lo dejo). Flojo en este tema, pues la verdad es que la gran mayoría va por el vermut, los combinados que hacen (calicasas les llaman) y alguna copita de tinto. El negocio va bien y tampoco parece que necesiten de una mejoría en este apartado.

Muy recomendable local de tapas en Granada.

En una esquina de la calle Elvira(para mi, la mejor de Granada para el tapeo) se encuentra este mítico local, casi siempre abarrotado. Solo hay 4 mesas, y casi siempre reservadas, por lo que la única opción, es tomarte la caña de pie. A 2 euros la caña, con su correspondiente tapa, bien elaborada y de buena cantidad, que va variando al pedir mas consumiciones. Carta de vinos clásica, con referencias de las DO's mas importantes. Servicio correcto del vino (solo correcto). El jamón Joselito, lo cortan a máquina (todo un sacrilegio!!. Algún vino de Granada a copas.
Muy recomendable para tapear.

De lo mejor de Granada en tapas.
El vermout casero con toque de gin excepcional.
A 3 € la cerveza o vino con su correspondiente tapa generosa.

Céntrico y muy concurrido este bar de tapas, decoración clásica y muy singular, lleno de turistas y parroquianos a la par, está siempre a rebentar, no hay que amilanarse, hay que entrar e intentar hacerse un hueco. Dispone de una gran barra y toneles que hacen las veces de mesas donde apoyar las tapas y sentarse en taburetes.

La carta está impresa en el mantel de papel que te ponen al servirte. La oferta es grande y variada: tablas combinadas, entradas, raciones, carnes y pescados, canapés, montaditos y tapas. El servicio que es muy simpático, eficiente y rápido es muy numeroso, casi hay un camarero por cada metro de barra, además de los que van retirando vasos y platos y sirviendo en mesas y barriles.

La carta de vinos, que también está impresa en el mantel de papel, junto al menú distingue entre: Ribera del Duero (roble y crianza); Ribera del Duero (reserva); Rioja (crianza); Rioja (reserva); Vinos de Granada; Otras denominaciones; Blancos y rosados y Cavas y Champagnes. La cristalería muy básica. Algunos vinos descansan en armarios climatizadores, no así los que se ofrecen por copas.

Al uso de la costumbre local, con cada bebida se acompaña una tapa, que por el tamaño, bien podría calificarse de ración en otros lares. La tapa de cortesía va cambiando a criterio del camarero, con el fin que no repitas.

Nuestra experiencia con cuatro cervezas, acompañadas de las reglamentarías tapas (bacalao con tomate; champiñones rellenos), con una generosa ración de ensaladilla rusa con langostinos y bacalao ahumado, por poco más de 15 euros.

Local carismático de tapeo en el centro de Granada.