Clásico pero muy bueno

De vez en cuando da gusto ir a un buen restaurante, clásico, sin grandes sorpresas pero con una materia prima excelente y los platos en su punto, amén de una relación calidad precio muy razonable.
Cuatro personas, buena mesa, y muy bien atendidos
Para compartir:
Zamburiñas al grill, exquisitas
Parrochas sobre tosta con pimientos de Gernika, sorpresa maravillosa
Platos principales:
Cazuela de almejas, de las mejores que hemos probado, bien llenas, sabrosas, en su punto, un lujo.
Rape con carabinero con base de puerros, normal
Bonito encebollado, un clásico pero era tal la calidad de la materia prima y el punto, no excesivamente hecho, que era una delicia.
Risotto de boletus, muy rico
Bebimos un godello (Valdesil), que acompañaba muy bien (16,50)
Para rematar 3 gintonics (Hendrick´s) y una teja (obsequio de la casa)
La factura, 170 euros, para cuatro.