Restaurante Betelu en Madrid
Restaurante Betelu
País:
España
Provincia:
Localidad:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
40,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Cierra:
domingo y lunes
Nota de cata PRECIO MEDIO:
49 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
7.6
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
7.7
Comida COMIDA
7.4
Precio medio entorno ENTORNO
5.6
RCP CALIDAD-PRECIO
8.1
Opiniones de Betelu
OPINIONES
9

BETELU es un clásico madrileño de la cocina de mercado de toda la vida, entorno familiar para un pequeño local con decoración clásica, que a día de hoy llevan los tres hijos de los fundadores del local.

El servicio de sala es de atención personaliza, liderado por los hermanos (Ana, Jose Antonio e Iñaki), en el que la carta es cantada y en el que se presentan platos de la cocina tradicional vasco navarra con variación de distintas salsas.

El servicio de vino es atendido por Jose Antonio con una carta muy cuidada e interesante, si bien, siempre me dejo aconsejar por esas novedades o curiosidades de fuera de carta que Jose Antonio esconde de sus múltiples visitas a bodegas o catas. En esta última ocasión, nos decantamos por la última botella de LA FINCA DE LOS LOCOS de Bodega Artuke, Rioja Alavesa a base de tempranillo y graciano.

De los entrantes a destacar el revuelto de bacalao, chistorra y espárragos frescos de navarra, de aperitivo siempre suelen presentarse unas deliciosas croquetas.

Como principales, por encima de las carnes, a destacar las propuestas sobre pescado, en mi última visita: cogote de merluza a la bilbaína (delicioso en punto y producto) pero cabe destacar también las propuestas de Kokotxas, besugo, rodaballo…, etc.

BETELU siempre es una opción.

Comida hecha el día del Pilar. De viaje por Madrid vuelvo a comer al Betelu y misma impresión que la vez anterior. Salmón en escabeche muy bueno, chistorra excelente, Ventresca de bonito muy buena y Lubina espectacular. Los postres bajan. La atención por parte de la señora del restaurante muy agradable. La niña se comió un solomillo con patatas bueno ( eso no suele fallar ). Con un albariño lagar de Cervera 105 euros en total.

Y es que no es ni una , ni dos sino varias veces las que arropado por el trato familiar que alli te dan y una comida exquisita he comido alli con la familia o distintos compañeros de trabajo. La croquetas de aperitivo ya apuntan maneras, para luego seguir con unas gambas al ajillo y unos deliciosos pimientos del piquillo rellenos de bacalao. De segundo un lenguado al horno, en su punto. De postre las torrijas exquisitas. Amplia carta de vinos a precios razonables. Para colofon nos invitaron a un pacharan helado y casero, que delicia!!

Después de un año y medio volvemos 3 amigos a cenar fuera de las Navidades.
Esta noche a un 50% la sala. El servicio, siempre familiar y cercano, se vuelca en agradar.
Nada cambia: Ni los aperitivos (croquetas), ni el que sigan sin carta (cocina de mercado vasco-navarra de los más tradicional, con variedad de entrantes y básicamente pescados del día).
Entrantes a compartir (servidos escalonadamente y cambiando platos):
Salmón escabechado: Rico, rico
Revuelto de bacalao: Para mi de lo mejor
1/2 de chistorra: Simplemente bestial
3 pimientos rellenos: Muy suave el relleno

Platos fuertes:
Ese día tenían un besugo de 2.5Kg. La mitad lo compartimos entre dos (a la espalda). El tercero en discordia, media lubina también a la espalda. Los pescados siguen perfectos (en su punto).

Postres:
Magníficas torrijas para terminar la cena.

Vinos: Sigue el interés del restaurante por tener una carta actualizada (coquetea con las novedades del mercado), no muy amplia y centrada en vinos de gama media (aptos para todos los bolsillos). Precios x1.5. Pedimos Emilio Moro 2005 (23€ + IVA) y Dominio de Tares Cepas Viejas 2005 (18€ + IVA). Las copas aceptables. Servicio solo incluye descorche.

Invitaron a chupitos de orujo y patxarán.

Precio total: 175€ (inc. IVA) (tomamos 3 cervezas)

Nota: Hay que ver lo que cambia la valoración de un restaurante al haber variado el sistema de puntuación.

Restaurante (7 u 8 mesas) que cuando se llena agobia. Mal climatizado. Trato familiar y atento.
Cocina tradicional vasco-navarra. Sin complicaciones. No hay carta. De segundos, solo pescados (aunque pueden ofrecerte algún solomillo de ternera).
Cena típica de Navidad para 10 personas. Aperitivo: Croquetas caseras.
Variados entrantes a compartir: Revuelto de bacalao, chistorra, navajas (sobresalientes), almejas a la marinera, salmón escabechado, gambas al ajillo y alubias de tolosa (estas últimas cremosísimas, bestiales).
Segundos: Esa noche solo había merluza, rape y lubinas salvajes (aprox. kilo y medio). Te lo preparan como quieras. Aconsejo el cogote de merluza, la merluza a la vasca o la lubina a la espalda. Lo preparan en su punto como pocos.
Postres caseros: ¡¡¡Qué arroz con leche o qué leche frita!!!. Sublimes.
Servicio vino: Carta muy corta pero con inquietudes (Remírez de Ganuza Rva., Calvario, Enrique Mendoza Syrah, Vallegarcía Viognier etc.). Precios ajustadísimos. Pedimos 2xViñas de Gaín 2004 (17€ inc. IVA) y 2xLos Ragajales 2005 (20€ inc. IVA). Copas aceptables y temperatura adecuada.
Invitan a pacharán casero.
Precio total (10 personas): 518,75€.

L relación calidad-precio es muy buena.
He ido varias veces y siempre me ha encantado.
Recomendables las alubias de tolosa, el besugo, torrijas.
Vinos de muy buena calidad y precio adecuado.
Servicio muy agradable y familiar.
El patriarca es fantástico y te muestra la materia prima.

He vuelto casi un año después y esta vez no he salido tan satisfecho. En general creo que la relación calidad precio, en cuanto a la comida, ha bajado ( gambas al ajillo de baja calidad 17 euros; puede que fuera un mal día). Salimos a 50 euros por cabeza y nada contentos. El servicio del vino sigue siendo bueno, conservador, variedad y buenos precios; lo peor las copas.

Extraordinario lugar, trato superfamiliar. precios correctísimos con raciones enormes. revuelto de setas impresionante (nos avisaron que el de bacalao estaba mejor). la racion de merluza era para dos personas, rape impresionante. y como colofón....qué torrija.

felicitaciones

Pequeño restaurante familiar, aforo de cuarenta y pico personas. Creo que son navarros. me lo habían recomendado varias veces, pero ésta ha sido la primera visita (San Valentín). Gran descubrimiento; excelente trato y rapidez en el servicio. Nosotros tomamos dos entradas para compartir, gambas al ajillo (abundante ración) y alubias de tolosa. De segundo, mi mujer cogote de merluza y yo lubina (aunque al final los compartimos también), todo de sorprendente calidad. Postre increibles torrijas (especialidad de la casa).
Buena carta de vinos y mejor precio (Guelbenzu evo 00 16€, Gran vos Rva 99 16€, Pago de Carraovejas 20€, Alion 96 36€, Remírez de Ganuza 40 y poco, y así un largo etc.)
Precio medio 40€
Altamente recomendable, de verdad.

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